Despidos, readmisión es el lema con el que los trabajadores de Alu Ibérica A Coruña (antigua Alcoa) vuelven hoy a la huelga indefinida que suspendieron temporalmente por la situación sanitaria. La plantilla retoma el paro que inició en Navidad cuando se cumple una semana del despido disciplinario del presidente del comité, Juan Carlos López Corbacho, y otros tres representantes sindicales. Estos ceses que Grupo Riesgo basa en un expediente de supuestas agresiones iniciado en diciembre han caldeado aún más el conflicto en la planta de aluminio de A Grela. Sus más de 300 trabajadores están llamados a una movilización a las cinco de esta tarde a las puertas de la factoría.

El Ministerio de Industria calificó la actuación de la empresa de “inadmisible” , en palabras de Raúl Blanco, secretario general de Industria, que esta semana abría la puerta a la posibilidad de buscar una nueva solución de futuro a la antigua Alcoa.

Precisamente ayer la comisión de Industria del Parlamento gallego debatió ayer una moción del BNG para garantizar la continuidad de la fábrica. La pretensión de los nacionalistas de que la Cámara solicitara al Gobierno la intervención pública de la planta se vio frustrada por la abstención del PSdeG y, sobre todo, por los votos en contra del PP, que sin embargo urgió al Ejecutivo central la convocatoria de la Mesa Industrial para que Grupo Riesgo (actual propietario) de explicaciones de los recientes despidos de representantes sindicales. El diputado nacionalista Ramón Fernández cargó contra la reventa de la antigua Alcoa de Parter Capital a Riesgo, en una operación de calificó de “fraude y estafa programada a gran escala”.

El Parlamento gallego rechaza así para la fábrica de A Coruña lo que sí acordó para Alcoa San Cibrao. El pasado octubre, O Hórreo aprobó por unanimidad una iniciativa del BNG, transaccionada con el PP, que solicitaba al Estado la intervención temporal de la planta de A Mariña. Ayer, en cambio, el Bloque lamentó la falta de implicación política en el conflicto de Alu Ibérica y advirtió de que aboca a la planta de A Grela a “un cierre que será insolvente” por los “sistemáticos impagos a proveedores” de Riesgo.