El Tribunal de Justicia de la Unión Europea tumbó el año pasado la decisión de la Comisión Europea que exigía a Apple la devolución de 13.000 millones de euros (más intereses) en impuestos impagados en Irlanda. Este martes el departamento de competencia que dirige la comisaria Margrethe Vestager ha vuelto a recibir un nuevo varapalo de la corte de justicia de la UE que complica aún más su batalla contra la ingeniería fiscal de las multinacionales y los pactos fiscales para minimizar el pago de impuestos. Según el TJUE, Bruselas no ha demostrado suficientemente la existencia de ventajas fiscales a favor de la filial luxemburguesa de Amazon y anula la decisión que le obligaba a devolver 250 millones en Luxemburgo.

Fue en octubre de 2017, tras una investigación, cuando la Comisión Europea decidió que las autoridades del Gran Ducado debían recuperar 250 millones que la multinacional habría dejado de pagar gracias a rebajas fiscales ilegales. “Cerca de las tres cuartas partes de los beneficios de Amazon no tributaron. En otras palabras, Amazon pagó cuatro veces menos de impuestos que otras sociedades locales sometidas a las mismas reglas nacionales”, denunció entonces Vestager.

La multinacional de Jeff Bezos no se quedó de brazos cruzados y decidió recurrir la decisión ante la justicia europea, lo mismo que el Gobierno de Luxemburgo. El Tribunal General de la UE les ha dado la razón y ha decidido anular aquella decisión al considerar que la Dirección General de la Competencia de la Comisión Europea “no demostró de manera suficiente conforme a derecho que hubiera una reducción indebida de la carga fiscal de una filial europea del grupo Amazon”. Según los jueces, la decisión de Bruselas se basó en un “análisis erróneo” y ninguna de las constataciones del Ejecutivo comunitario demuestran que hubiera ventajas fiscales.

Consuelo con Engie

La corte, en cambio, sí le ha dado la razón a la Comisión en su caso contra la empresa eléctrica francesa Engie. En junio de 2018, tras otra investigación pormenorizada, Bruselas reclamó la devolución en Luxemburgo de 120 millones de euros a cuenta también de un tratamiento fiscal ventajoso. Según denunció entonces Vestager gracias a dos acuerdos fiscales (tax rulings) dos filiales de Engie eludieron el pago del 99% de los beneficios durante una década que no se abonaron en ninguna parte. “El resultado es que ha pagado un tipo efectivo de sociedades del 0,3% sobre determinados beneficios”, señaló Vestager.

La empresa, lo mismo que las autoridades de Luxemburgo, decidieron recurrir la decisión aunque en esta ocasión el tribunal sí ha dado la razón al Ejecutivo comunitario al constatar la existencia de un tratamiento fiscal ventajoso. El Gobierno de Luxemburgo ha valorado positivamente el resultado del caso Amazon mientras que ha anunciado un análisis en profundidad de la sentencia sobre Engie y se reserva el derecho a presentar recurso. Lo mismo que la Comisión Europea en el caso de Amazon.

La vicepresidenta Vestager ha vuelto a reiterar que el tax ruling emitido por Luxemburgo a Amazon permitió que tres cuarto de los beneficios de todas las ventas no pagaran impuestos hasta 2014. "Todas las empresas debe pagar su parte justa de impuestos. Las ventajas fiscales concedidas solo a determinadas multinacionales daña la libre competencia en la UE" y evitan la recaudación "de fondos necesarios para inversiones", ha avisado.