Cientos de personas se concentraron ayer a mediodía en la Praza do Concello de Xove para reclamar una solución definitiva que garantice la producción de aluminio y el mantenimiento de los puestos de trabajo en el complejo industrial de San Cibrao, justo cuando se cumple un año de la presentación de un ERE para más de 500 trabajadores de la fábrica por parte de la multinacional Alcoa. En este momento están en marcha las conversaciones con seis potenciales compradores para la posible venta de la fábrica de aluminio a través de la SEPI.
El comité de empresa de Alcoa San Cibrao ya avanzó que no quiere que se repitan los “mismos errores” de la venta de Alcoa en A Coruña y Avilés (actual Alu Ibérica), investigada por posible estafa. Precisamente, en el transcurso de la concentración de ayer, el líder sindical José Antonio Zan, aprovechó su intervención para anunciar que la próxima se semana la representación de la plantilla empezará a reunirse con las empresas interesadas en hacerse con la planta de aluminio para conocer sus proyectos de primera mano. La primera de esas reuniones tendrá lugar con representantes del grupo Liberty, aunque previsiblemente se iniciarán también los contactos con “algún otro” posible comprador.
La propia Alcoa se ha comprometido a trabajar directamente con ellos para definir las condiciones de la operación, pero con el compromiso de que la transacción se hará, llegado el momento, con la mediación del Gobierno de España.
El grupo Liberty, a través de su división de aluminio Alvance, fue el primero en mostrar interés por la adquisición de la fábrica de San Cibrao y el comité de empresa ya se reunió en su momento con los directivos de la multinacional británica para conocer sus intenciones y el proyecto industrial de esa compañía para la factoría mariñana.