Hoy se registrará un nuevo récord en el precio de la luz en el mercado mayorista (el denominado pool) al ascender hasta los 90,95 euros el megavatio-hora, el segundo precio más alto del año, después del registrado el 8 de enero (94,99 euros) por los efectos de la tormenta Filomena, y el noveno más alto de su historia, según los registros del Operador del Mercado Ibérico (OMIE).

A falta de conocer cómo acaba el mes, los primeros 15 días de junio el precio de la electricidad se ha situado en torno a los 81 euros de media, un 36% más que los 59 euros que marcaba en la primera quincena de mayo. Unas cifras extraordinarias que se deben, a priori, al alza del precio del gas en los mercados internacionales y el auge del precio del CO2 que ha ido incrementando los de la luz los últimos meses sin tope.

El mercado eléctrico se rige por un sistema marginalista, por el cual la última energía en casar oferta y demanda es la que marca el precio para el resto de tecnologías. La última en entrar es la de los ciclos combinados (queman gas natural), afectados por el gas y el CO2, y estos serán los que fijen ese precio. No obstante, la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha reclamado a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) que esté vigilante «por si pudiera haber comportamientos contrarios al buen funcionamiento del mercado».

El peso en la factura

El precio de la energía tiene un peso en la factura cercano al 30%, y alrededor del 50% corresponde a los peajes —el coste de las redes de transporte y distribución— y cargos —costes asociados al fomento de las renovables, a las extrapeninsulares y las anualidades del déficit de tarifa— y algo más del 20% a los impuestos.

Así, nada tiene que ver el incremento del precio en el mercado con la llegada de las nuevas tarifas de la luz, en vigor desde el pasado 1 de junio. y que llevó a muchos hogares a cambiar sus hábitos.