La riqueza financiera de las familias españolas, que se mide por la diferencia entre los ahorros que atesoran y las deudas que tienen, se elevó en plena pandemia hasta 1,63 billones de euros a cierre del primer trimestre, un 8,6 % más que un año antes. Los activos financieros netos (dinero en efectivo, depósito y acciones en empresas) representaron el 147% del PIB, 25,2 puntos porcentuales por encima del nivel de marzo de 2020, según las Cuentas Financieras de la economía española del primer trimestre publicadas ayer por el Banco de España.