El gigante de la moda ha salvado el año más difícil de su historia tras el estallido de una crisis económica sin precedentes provocada por el COVID-19. La pandemia que azotó los negocios y actividades de todo el mundo obligó a Inditex a bajar la persiana en sus tiendas durante meses —más de un año después del estado de alarma ya están abiertas el 98%—, lo que provocó un aumento del 77% de sus ventas online por más de 66.000 millones de euros y coloca a la compañía coruñesa entre los líderes mundiales de moda por internet. Tras cerrar el año del coronavirus con unas ventas que superaron los 20.000 millones y un beneficio neto que ascendió a 1.106 millones, Inditex afronta el futuro con “optimismo y confianza”, en palabras de su presidente, Pablo Isla, con una estrategia de gestión centrada en el modelo online y sostenible.

“La sostenibilidad es un pilar estratégico igual que la digitalización y la integración del mundo físico y el digital”, proclamó Isla en su discurso a los accionistas en la junta general en la que resaltó que el de la pandemia ha sido un “año clave en la transformación estratégica de la compañía”, que continúa este 2021 con un crecimiento vertiginoso de las ventas por internet: casi un 70% más en el primer trimestre.

El grupo textil gallego, que ya vende más que antes del COVID pese a tener todavía tiendas cerradas— se propone ser más verde y más digital. Durante la junta de accionistas celebrada ayer, Isla anunció una inversión adicional de 2.700 millones para este año, el próximo y 2022 para reordenar todo su espacio físico y adaptarlo a la venta online —1.000 millones para digitalización y 1.700 millones a la incorporación de las últimas tecnologías a las tiendas del grupo, con la apertura prevista de hasta 450 grandes tiendas flagship en estos tres años—.

“La transformación iniciada en 2012 está dando los frutos esperados”, expuso Isla, al tiempo que destacó la “fortaleza de transformación estratégica de Inditex con su modelo de negocio integrado, digital y sostenible” gracias “al compromiso, talento y trabajo de todas las personas que la integran”, lo que ha permitido al grupo tener unos buenos resultados en un escenario de máxima complejidad por la crisis del COVID.

Con una inversión superior a los 11.000 millones en los últimos diez años, Inditex ha logrado una plataforma plenamente integrada y sostenible de tiendas físicas y online, capaz de servir a clientes en 216 mercados de todo el mundo. En el año de la pandemia, el gigante textil sumó 29 mercados a través de Internet y abrió tiendas en 29 puntos.

Además, la compañía cuenta con más de 200 millones de seguidores en redes sociales y un tráfico de 15 millones de personas al día. “Una presencia de la venta online muy significativa que nos convierte en uno de los mayores distribuidores de moda online en el mundo con el mayor crecimiento y rentabilidad”, destacó el presidente de Inditex.

Sostenible

En su intervención, Isla también fijó el nuevo calendario para los objetivos de sostenibilidad: adelanto a 2040 de las emisiones netas cero, diez años antes de lo previsto, algodón más sostenible para 2023 —se preveía para 2025—, energías cien por cien renovables el próximo año —supera el 80% lo programado— y con más de la mitad de las prendas pertenecientes a Join Life en 2022, el etiquetado de máxima sostenibilidad del grupo textil.

“Es un planteamiento ambicioso con objetivos serios y de liderazgo en sostenibilidad, que es un elemento clave en nuestra estrategia”, defendió Isla tras detallar que el año pasado se alcanzó el objetivo del 35% de prendas con esta etiqueta que distingue los procesos y materias primas más sostenibles, por encima del 25% fijado para ese ejercicio. También se logró el 80% de consumo de energía renovable, frente al 65% marcado y el aumento en un 91% el uso de algodón más sostenible.

De cara al futuro, Isla aseguró que los resultados de los últimos meses invitan a mirarlo “con optimismo y solidez y pensando que hay mucha capacidad de crecimiento”.

Otro de los retos de Inditex es la eliminación de plásticos, con un primer hito en 2020 al desaparecer todas las bolsas de plástico de sus tiendas y pedidos online, y con el siguiente objetivo marcado para 2023 de eliminar todos los plásticos de un solo uso para clientes. Asimismo, el 100% de los residuos de las actividades (cartonajes, plásticos, papel, etc.), serán completamente reciclados también en 2023.

En cuanto a los tejidos, en 2023 todas las prendas que provienen de fibras de la celulosa vegetal serán ya 100% sostenibles, mientras que en 2025 todo el poliéster y lino será 100% reciclado o sostenible según los parámetros previstos.

La compañía paga el 25% de sus impuestos en España, más de 1.200 millones

El grupo Inditex pagó el año pasado 1.201 millones de euros en impuestos en España, un 25,6% del total de su contribución tributaria a nivel global, que rozó los 4.700 millones. De la factura fiscal en el país de origen, más de 600 millones corresponden a impuestos directos. La tasa efectiva en Sociedades fue del 21,2%. Los más de 1.900 accionistas que participaron en la junta (de forma presencial, telemática o representados por terceros, como el caso del fundador de la compañía, Amancio Ortega) avalaron todos los acuerdos elevados por el consejo de administración. Entre ellos, la distribución del pago de un dividendo bruto de 0,70 euros por acción, 0,22 euros en concepto de dividendo ordinario y 0,48 euros en concepto de dividendo extraordinario, con un 60% de payout ordinario y dividendos extraordinarios, lo que supone duplicar el pago realizado en noviembre del pasado año. “Tenemos una política de dividendo atractiva”, reconoció el presidente de Inditex. La junta también dio luz verde al nuevo plan de incentivos para 750 altos cargos del grupo. La nueva política de remuneraciones recoge el aumento de la retribución variable para su presidente, y el consejero delegado, Carlos Crespo. De esta forma Isla mantendrá un sueldo fijo de 3,25 millones —inalterado desde 2013— mientras que la retribución fija de Crespo será de 1,5 millones.