Las pernoctaciones en alojamientos turísticos extrahoteleros (apartamentos, cámpines, casas rurales y albergues) alcanzaron los 16 millones en julio, un 21,7% menos que en el mismo mes de 2019, si bien las de los viajeros residentes en España se situaron por encima de los niveles prepandemia (un 19,3% más).

Además, según la Encuesta de Ocupación en Alojamientos Extrahoteleros, publicada este martes por el Instituto Nacional de Estadística, este julio se ha registrado un 58% más de pernoctaciones que hace un año, cuando esta temporada coincidió con la desescalada tras el primer estado de alarma.

Durante los siete primeros meses de 2021, este tipo de ocupación aumentó un 29,1% respecto al mismo periodo del año anterior.

Las de los residentes en España supusieron el 72,5% del total (11,6 millones), y las de no residentes, el 27,5% restante (4,4 millones). En comparación con 2019, las pernoctaciones de los residentes se han situado un 19,3% por encima de los niveles del último julio previo a la crisis sanitaria del coronavirus.

Sin embargo, las de los no residentes han bajado un 59,1%, consecuencia del menor ritmo en la recuperación del turismo internacional, que aún arrastra limitaciones en ciertos países.

En julio abrieron en España 157.617 alojamientos extrahoteleros, lo que representa el 80,7% del total del directorio de establecimientos en ese mes.

El INE ofrece asimismo la evolución de las pernoctaciones en el conjunto de alojamientos turísticos españoles, incluido hoteles, que ascendieron a 42,4 millones, lo que supone un aumento del 93,9% respecto a 2020, con el mercado alemán, el francés y el británico, como principales emisores de no residentes.

Crecen los apartamentos turísticos

Las pernoctaciones en apartamentos turísticos se situaron en 6,5 millones en julio, un 88% más que en 2020, debido a que las de viajeros residentes aumentaron un 81,2% y las de no residentes, un 101,7%.

La Comunidad Valenciana, Andalucía y Canarias fueron los destinos principales, con 1,7 millones, 1,1 millones y 1 millón de pernoctaciones, respectivamente. Por zonas, la Costa Blanca fue el destino preferido en apartamentos turísticos (927.473 pernoctaciones), mientras que Ibiza y Formentera presentaron el mayor grado de ocupación, con un 74,6%.

Los puntos con mayor número de pernoctaciones fueron Benidorm (Alicante), San Bartolomé de Tirajana (Las Palmas) y Oropesa del Mar (Castellón).

El cámping, al alza

Las pernoctaciones en cámpines sumaron 7,2 millones en julio, un 45,2% más que hace un año. Por procedencia, las de viajeros residentes subieron un 43,3% y las de no residentes, un 51,6%.

Cataluña fue el destino preferido, con más de 3 millones de pernoctaciones, y más concretamente la Costa Brava, con 1,3 millones. De hecho, los puntos con más pernoctaciones fueron Torroella De Montgrí (Gerona), Tarragona y Montroig del Camp (Tarragona).

Asturias lidera el turismo rural

También repuntaron respecto a 2020 las pernoctaciones en alojamientos de turismo rural, que en julio superaron los 1,6 millones. Ello estuvo marcado por la ocupación de residentes, que aumentó un 6,7%, pero, sobre todo, por la de no residentes, que avanzó un 90,4%.

Asturias fue el destino más elegido, con 229.085 pernoctaciones, mientras que por zonas turísticas lo fue Mallorca, con 141.975.

Con todo, el mayor avance lo han registrado las pernoctaciones en albergues, que en julio rondaron las 607.630, un 147,4% más que en 2020. Galicia fue el destino principal de este tipo de turismo, con 143.271 pernoctaciones, aunque Baleares alcanzó la mayor ocupación, con el 59,5% de las plazas ofertadas.