Marta Ortega, heredera del imperio Inditex, se mueve con naturalidad bajo la luz del foco mediático, mucho más cómoda de lo que ha estado nunca su padre en la esfera pública. Amancio Ortega (85 años) ha rehuído el contacto con los medios toda su vida. Su hija menor (37 años) acaba de conceder su primera entrevista, a la revista del periódico estadounidense The Wall Street Journal. En ella revela algunas de las claves del éxito de la compañía y da un paso al frente: “Estaré donde la empresa más me necesite”, afirma la directiva de Zara Woman, que está llamada a jugar un papel esencial en el futuro de la compañía.

The Wall Street Journal Magazine dedica su última portada a la hija de Amancio Ortega y Flora Pérez. La revista estadounidense presenta a Marta con sus dos apellidos y con un lema: “el arma secreta de Zara”. Esta idea se desarrolla en la conversación, con el propósito de descubrir a esta directiva que tiene todas las papeletas para la liderar la segunda generación de la empresa familiar que su padre fundó en 1985.

Marta Ortega Pérez está “abierta” a adoptar el cargo que Inditex considere necesario para ella, aunque ha incidido en que prefiere trabajar de cerca con los productos de la compañía: “Para ser honesta, me gustaría estar cerca del producto. Creo que mi lugar es estar cerca del producto, como mi padre siempre hizo”, remarca.

Zara ha permitido que ir a la moda sea tan fácil y asequible”. Manteniendo la prudencia y el halo de humildad con el que siempre ha querido caracterizarse la familia, la hija pequeña del empresario más rico de España se ha reivindicado como una de las almas creativas de la compañía. En sus declaraciones a uno de los medios económicos con más difusión en todo el mundo, Marta Ortega ha querido romper una lanza en favor del impacto social positivo que ha generado la compañía que creó su padre, por haber hecho posible que ir vestido a la moda “sea tan fácil y asequible”.

En este sentido, y en el mismo artículo publicado este martes en la revista del diario estadounidense, el presidente de Inditex, Pablo Isla, ha afirmado que el papel de Marta Ortega en la empresa será más significativo en la próxima década a medida que la compañía textil aumente su foco en la sostenibilidad. “Marta es muy humilde. Pero al mismo tiempo, por supuesto, tiene opiniones firmes sobre muchas cosas diferentes”, añade el primer directivo de la textil.

Marta Ortega empezó a trabajar en Inditex en 2007 como asociada de ventas en Londres tras graduarse en International Business por la European Business School de la Regent’s University de la capital británica. Tras desempeñar varias tareas profesionales en diferentes destinos internacionales y divisiones, en la actualidad su papel en Inditex está relacionado con el diseño y desarrollo de producto de Zara Woman.

“La primera semana pensé que no iba a sobrevivir”. Marta Ortega confiesa en la entrevista que a pesar de ser la compañía de su padre los comienzos fueron duros. Especialmente en la época en la que trabajaba como adjunta a la responsable de ventas del local de Zara de la calle Kigs Road en Londres, hace ya 14 años: “La primera semana pensé que no iba a sobrevivir”, asegura en la publicación.

La directiva de Zara Woman ha pasado por distintos puestos de responsabilidad en la compañía, tanto en la red de tiendas como en la sede central de Arteixo, y tiene claro el valor del trabajo colectivo en una empresa del tamaño de Inditex: “No se trata de que una sola persona haga un buen trabajo. Somos un equipo”, asegura.

“Creo que [mi padre] nunca fue el mejor en nada en particular, pero fue el mejor en encontrar a la mejor persona para hacer cada cosa”

Precisamente en esa habilidad para elegir y dirigir el equipo es donde Marta ve el gran acierto de su padre: “Creo que [mi padre] nunca fue el mejor en nada en particular, pero fue el mejor en encontrar a la mejor persona para hacer cada cosa”.

A lo largo de la entrevista, se vinculan los hábitos de la directiva coruñesa con la cultura empresarial que instauró Amancio Ortega. “Al igual que su padre, que todavía acude a la oficina casi todos los días, Ortega Pérez se sienta entre los compañeros de trabajo de Zara”, explica la revista. Y continúa: “Cualquiera que busque pistas sobre el éxito de la empresa puede empezar por considerar dónde trabaja Marta: en una mesa compartida de estilo industrial, con sillas giratorias y enrollables de color negro estándar. A solo unos metros de distancia, en esta oficina blanca de planta abierta en las afueras de A Coruña, una ciudad portuaria en Galicia, la región más al noroeste de España, se encuentra el mismo tipo de silla y escritorio que usaba Amancio Ortega”.

“No sé nada de grandes cifras. No es algo que nos preocupe”. La abundancia de detalles del día a día contrasta con la ausencia de información financiera del grupo Inditex, un tema que Marta Ortega ha esquivado asegurando que es un asunto que está fuera de su control. “Obviamente somos una gran empresa, pero siento que no es tan grande. No sé nada sobre grandes cifras. Ni siquiera queremos hablar de ellas. En nuestro trabajo diario no es algo que nos preocupe”, aseguró.

“Construir puentes entre la tecnología y la moda”, el futuro

Marta Ortega comparte en su primera entrevista algunas de sus reflexiones sobre el futuro de la industria textil. La directiva de Inditex considera que el éxito en los próximos años pasará por “construir puentes entre la alta costura y la calle, entre la tecnología y la moda, entre el arte y la funcionalidad”. La hija de fundador de Zara resalta el valor creativo del Grupo Inditex y su sensibilidad hacia los trabajadores: “Intentamos buscar el mejor diseño. Respetamos el trabajo de las personas”, asegura a The Wall Street Magazine, y estima en el 50% el porcentaje de la firma que se dedica al diseño de alguna manera.

La revista neoyorkina afirma que en la sede central de Arteixo trabajan unas 140 patronistas y un centenar de costureras. Marta Ortega insiste en la autenticidad de Inditex: “Tenemos nuestra propia identidad. Y hemos estado desarrollando nuevos productos desde cero durante mucho tiempo”. Hacer extensiva a un gran público la combinación de identidad, diseño y calidad parece una de las de las claves de futuro para Ortega Pérez: “No solo unas pocas personas deberían poder tener acceso a la alta calidad”, asegura la heredera del imperio Inditex.