Seis semanas duraron las negociaciones entre el Banco Sabadell y los sindicatos para sacar adelante el nuevo Expediente de Regulación de Empleo (ERTE) que, finalmente, afectará a 1.380 personas. Ambas partes lograron ayer por la tarde un principio de acuerdo, que marca la voluntariedad en las salidas. La cifra final supone alrededor del 9% de la plantilla sin contar la filial británica TSB y rebaja un 28% el número de afectados que la entidad preveía en un principio.

Además, Sabadell se ha comprometido con los representantes de los trabajadores a recolocar al 100% de los afectados por el ajuste junto con una empresa especializada.