"Si los precios fallan es imposible que el sector tabaquero en Extremadura tenga futuro", denunciaron este martes los dirigentes agrarios Ignacio Huertas (UPA-UCE), Ángel García Blanco (Asaja Extremadura) y Ángel Pacheco (Cooperativas Agroalimentarias) sobre el nuevo frente que se ha abierto para el sector. Hace justo un año la continuidad de las explotaciones tabaqueras en el norte de la comunidad estaba en el aire ante un nuevo escenario en la Política Agraria Comunitaria (PAC), que amenazaba con eliminar la región propia de la que dependen las ayudas al cultivo. Con esa incógnita ya despejada y un horizonte de futuro que las organizaciones agrarias consideran "razonable" (el plan estratégico mantiene La Vera y una ayuda redistributiva a las primeras 20 hectáreas) el sector teme ahora de nuevo por su futuro y el principal problema son los precios que están percibiendo. Este año están por debajo de lo que recibían el pasado y supone 60 céntimos menos por kilo de lo que les cuesta producirlo.

Tras este problema sitúan a Cetarsa, que está pagando esta campaña entre 2,20 y 2,30 euros por cada kilo, frente a los 2,75 euros que supone producirlo, según denuncian. De momento no han anunciado acciones de protesta aunque sí han convocado una asamblea para consensuar qué iniciativas deben tomar para defender el cultivo del que dependen unos 2.000 productores y 20.000 personas del norte de la región. La reunión será este miércoles en la casa de cultura de Talayuela, a las 19.00 horas.

"Hay varios problemas, pero el principal que tenemos en este momento es el de los precios", insiste el dirigente de UPA-UCE, Ignacio Huertas. Las ayudas de la PAC representan el 40% de la renta del agricultor y el 60% restante lo debe aportar lo que perciben por la producción, algo que ahora mismo no está sucediendo. "En estas condiciones no se puede garantizar el futuro en un momento que es decisivo, porque los tabaqueros van a tener que adquirir con la nueva PAC compromisos de producción durante varios años (cinco años la misma cantidad en el caso de la producción integrada), y para eso necesitan unos precios que cubran los costes y un compromiso temporal de contratación que no tenemos. No pueden encontrarse con que ellos se comprometan a producir sin que nadie se comprometa a comprarlo y eso es lo que tenemos que exigir a la industria", lamenta Huertas.

Mesa de negociación sobre el tabaco

Según explicaron las tres organizaciones agrarias, ya se han mantenido contactos tanto con la Consejería de Agricultura como con Cetarsa para crear una mesa de negociación en la que abordar los planes a largo plazo y contrataciones plurianuales, que permitan dar estabilidad a la actividad, aunque por el momento no han obtenido respuesta.

Junto al problema de los precios el sector denuncia otros factores que pueden amenazar la continuidad del cultivo. Para Ángel García Blanco (Asaja Extremadura) el sector tabaquero se encuentra "en una situación de tormenta perfecta", en la que junto a los bajos precios confluyen los pormenores de la PAC que no acaba de alumbrarse, el incremento de los costes de producción por las subidas en electricidad o en productos fitosanitarios y el borrador de la ley de prevención del fraude fiscal que pretende establecer un protocolo de gestión de las explotaciones. "Ese borrador coloca a un policía detrás de cada tabaquero y amenaza con bloquear las explotaciones cuando aquí ya está cumpliéndose el decreto de trazabilidad de la Junta", denunció García Blanco.

Ángel Pacheco, presidente de Cooperativas Agroalimentarias, ha emplazado a que la asamblea convocada "sirva para establecer una mesa de diálogo con la que llegar a acuerdos que sean beneficiosos para todo el sector y en los que participen todas las partes, porque todas suman para que podamos alcanzar precios justos que garanticen el futuro de este cultivo", señaló.