Unicaja y la mayoría de la representación laboral del banco alcanzaron en la madrugada de ayer, in extremis, un acuerdo de principio sobre el expediente de regulación de empleo (ERE) que promueve la entidad tras la absorción de Liberbank. El documento, que prevé prejubilaciones a partir de los 54 años, bajas voluntarias y rescisiones forzosas en el supuesto de que no se alcanzara por ambas vías el objetivo de reducción de plantilla, logró el respaldo de cinco de los sindicatos presentes en la mesa negociadora (CCOO, Suma+t, Sibank, UGT y CSIF), que suman el 74,67% de la representación, tras una negociación maratoniana que culminó a las siete de la mañana. Habrá entre 1.314 y 1.513 salidas (el 15% de la plantilla).