Ventas se reunió ayer con los dos fondos de inversión que la Xunta buscó a través de KPMG para la posible compra de la planta de palas de Viveiro. La compañía asegura que no tienen “un interés firme y real”, al igual que el tercer candidato propuesto también por la auditora, que ni siquiera participó en la reunión. Vestas dice que sigue abierta a facilitar la venta y transmisión de equipos e instalaciones. El 1 de enero reconvertirá la factoría en un centro de mantenimiento.