Ibercaja está a punto de accionar el botón para iniciar su cotización en las bolsas de Madrid, Barcelona, Bilbao y Valencia, que se espera materializar en el mes de febrero, cuando se vislumbra una ventana de oportunidad en el mercado. Es más, este mismo jueves, la entidad ha confirmado oficialmente sus planes a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). El consejo de administración del banco aragonés se reunió este miércoles para concretar los detalles y volverá a hacerlo en fechas inminentes para deliberar y autorizar el lanzamiento del salto al parqué, siempre antes del 1 de febrero, que es la fecha limite que se ha marcado.

Según un comunicado difundido este jueves a primera hora por la propia entidad, las acciones que se pondrán a la venta serán de la Fundación Bancaria Ibercaja, el accionista mayoritario del banco, que ahora controla el 88% del capital y que tras esta operación tratará de quedarse por debajo de 50% para cumplir con la Ley de Fundaciones Bancarias, aunque siempre manteniendo el control del banco.

Con esta operación, la entidad también quiere favorecer las tres transformaciones que dice tener en marcha: la comercial, la operativa y la financiera.

"Estamos ante una operación de salida a Bolsa histórica para Ibercaja Banco, que fortalece la confianza que todos tenemos en la proyección de futuro del banco, para dar continuidad así a los 145 años de trayectoria ejemplar que nos precede", ha dicho su presidente, José Luis Aguirre.

El Banco se creó en 2011 tras la segregación y traspaso a Ibercaja Banco del negocio financiero de la extinta Caja de Ahorros y Monte de Piedad de Zaragoza, Aragón y Rioja, hoy transformada en la Fundación Ibercaja.

En 2013 absorbió Banco Caja3, formada a raíz de la segregación y posterior fusión del negocio financiero de tres antiguas cajas: Caja de Ahorros de la Inmaculada (hoy Fundación Inmaculada de Aragón), Caja Badajoz (ahora Fundación Caja Badajoz) y Caja de Ahorros Círculo de Burgos (Fundación Círculo de Burgos). Esas fundaciones son ahora accionistas minoritarios.

A 30 de septiembre de 2021 Ibercaja Banco contaba con 58.200 millones de euros en activos totales, alzándose como el noveno banco español por tamaño en términos de activos totales y una cuota de mercado del 2,4 % en préstamos a particulares y entidades no financieras.

Pasos a seguir para el salto bursátil

Tras el visto bueno del consejo y el envío oficial a la CNMV del documento formal con el que revela su intención de cotizar ('intention to float' o ITF) y el banco empezaría a tomar el pulso de los grandes inversores para valorar el interés que despierta la operación, algo que ya viene sondeando en las últimas semanas. Pocos días después, se publicaría el folleto del proyecto, en el que se detallan las características y los precios de las acciones, unas detalles que el banco dará conocer a los analistas y posibles inversores en una 'roadshow' por las principales plazas financieras del mundo. A partir de ese momento y si nada se tuerce en el camino, habría un plazo de entre tres y cinco semanas para que se produzca el simbólico toque de campaña que marca el estreno bursátil.

Ibercaja ha expresado en fechas recientes su intención de salir a bolsa en el primer trimestre de 2022 si se daban las condiciones del mercado eran las propicias, una decisión que ya ha tenido que posponerse en varias ocasiones en los últimos años por diferentes circunstancias. La entidad tiene de plazo hasta finales de 2022 para materializar su salto al parqué, como le obliga la ley de las antiguas cajas de ahorros para que la Fundación Bancaria reduzca por debajo del 50% la participación en su capital, que ahora es del 87,5%. El limite temporal vencía inicialmente al cierre de 2020, pero el Gobierno de España le concedió una prórroga de dos años tras el estallido de la pandemia de coronavirus, que hacía inviable la ejecución de esta operación.

La Fundación Bancaria quiere quedarse con una participación de entre el 40% y el 49%, según las condiciones de mercado que se den. De esta manera, se mantendría como el accionista minoritario mayoritario para asegurar la estrategia del banco.

Un contexto favorable

La esperada ventana de oportunidad podría darse en febrero por diversas razones. Por un lado, los factores externos soplan a favor del sector financiero por la normalización de la política monetaria. Y por otro, la entidad se encuentra a nivel interno en su mejor momento para afrontar este proceso histórico, con unos resultados económicos que han mejorado notablemente en el último año. En los nueves primeros meses de 2021, obtuvo un beneficio neto de 146 millones de euros, el doble que el mismo periodo del año anterior.

La entidad ha logrado además mejorar de forma sustancial sus ratios de rentabilidad, eficiencia y solvencia, unos indicadores que espera reforzar en los próximos meses al finalizar el 30 de junio la aplicación del último expediente de regulación de empleo (ere) pactado con los sindicatos, que contempla la salida de 750 trabajadores y el cierre de 199 oficinas bancarias (hasta el pasado mes de diciembre ya se había clausurado un tercio de estas).

Por todo ello, las perspectivas de negocio de Ibercaja han mejorado, por lo que modificó al alza los objetivos de rentabilidad sobre fondos propios (ROTE) hasta el 9% para 2023, frente al 7% estimado inicialmente, así el control de la morosidad, según comunicó en diciembre a la CNMV. De esta manera, lograría cubrir el coste de capital, como reclama el BCE al sector.

Según ha publicado 'Expansión', el banco cerró la semana los contactos preliminares con los inversores, un paso previo a que el consejo de administración pueda decidir el lanzamiento del salto al parqué. Este diario económico asegura que su plan es empezar a cotizar con una valoración de entre 1.650 y 2.100 millones de euros. El objetivo de la dirección de Ibercaja sería contar con el apoyo de grandes inversores, como fondos de inversión de reconocido prestigio en el mercado.

Rothschild actúa como asesor independiente de Ibercaja, que también cuenta con Morgan Stanley y JPMorgan como coordinadores globales de la salida a Bolsa y con UBS y Bank of America como entidades colocadoras.