La Seguridad Social estima un aumento de 21.000 afiliados en febrero en términos desestacionalizados, unos 50.000 brutos, hasta los 19.918.726 cotizantes al cierre de este mes, según el avance de la primera quincena, presentado ayer por el ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones. “Mejora el empleo de calidad y se manifiesta en los últimos dos meses, a partir del inicio de la reforma laboral, en distintas dimensiones. Crecen los afiliados con contrato indefinido y decrecen los afiliados con contrato temporal”, aseguró José Luis Escrivá, que, ante el ritmo de crecimiento de afiliación “muy alto”, descarta ya que esto se produzca por un “reajuste” tras la pandemia.

En la primera quincena se registraron 160.000 afiliados más que en años anteriores, mientras que los contratos temporales se redujeron en 150.000 y aumentaron en 20.000 los fijos discontinuos, lo que ha desplomado en 10 puntos porcentuales los contratos de muy corta duración, al pasar de una media del 39,4% entre los años 2017 a 2020, al 29,5% en enero. La duración media de esos contratos era de 5,2 días y ha pasado a los 6,3.