La vicepresidenta tercera y ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha defendido el gasoducto Midcat que conectaría la red española con Francia. No obstante, durante su intervención en la Reunió Cercle d'Economia en Barcelona, ha destacado que al tratarse de una cuestión de seguridad de suministro a escala europea debe haber "financiación de terceros", es decir de la Unión Europea (UE).

A su vez, a preguntas del auditorio canalizadas por el presidente del Cercle, Javier Faus, ha considerado necesario coordinar la apuesta con Francia y analizar la vida útil de la infraestructura, para que más adelante pueda trasladar biogás o hidrógeno verde.

Ribera ha explicado que la actitud de Francia, que se había opuesto al Midcat, tiene que importar electricidad de España y de otros países porque tiene paralizadas la mitad de su potencia nuclear y eso, aunque coyuntural, abre de nuevo el debate sobre las interconexiones.

Y eso afecta también a las interconexiones eléctricas. En este sentido ha destacado que no existe ningún otro bien o servicio que tenga las limitaciones que tiene la electricidad para intercambiarse entre países de la Unión Europea (UE).

También ha explicado que es "gratificante" ver la unidad europea respecto a reducir la dependencia energética de Rusia. "Se está buscando cómo desplazar o sustituir la importación de ese país y hacerlo de manera coordinada" y hay consenso en que esto se convierta en una oportunidad para reducir la dependencia, ha dicho.

También ha considerado "clave" rebajar los beneficios para que se reduzca el precio de la energía para las familias y para las industrias.