El futuro de la térmica de Endesa en As Pontes (A Coruña) está en manos de Red Eléctrica. En pleno debate en España sobre si la central coruñesa debe seguir activa o no, pese a tener ya a avanzado su proceso de cierre, el Gobierno de Alemania dio ayer luz verde a la reactivación de las centrales eléctricas que funcionan con carbón y petróleo que forman parte de la reserva energética, como parte del paquete de medidas para ahorrar gas de cara al próximo invierno. Un día después de que trascendiese que el Gobierno de Sánchez ha requerido un informe técnico a Redeia (antes Red Eléctrica), que, entre otras acciones, le permita recuperar la actividad de la central coruñesa, la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, reconoció que se retrasará el cierre si el operador del sistema eléctrico, considera que, con el escenario abierto a raíz de la invasión rusa de Ucrania y la crisis energética desatada, sería útil para garantizar el 100% del suministro.
Todo está en manos de Red Eléctrica. “Si nos dice que en sus escenarios, tal y como venía diciendo hasta ahora, es posible garantizar el cien por cien de la electricidad sin mantenerla abierta, no tiene sentido mantenerla abierta”, defendió ayer la ministra de Transición Ecológica en una entrevista con Onda Cero. Ribera descartó que el Gobierno tenga interés en prolongar la vida de la central, cuyo proceso de cierre ha sido —dijo— “enormemente complejo” e “intenso” durante los últimos cuatro años, y retrasar así “un proceso que —alegó— beneficia a los vecinos de la comarca”.
Mantener abierta esta central de Endesa en As Pontes, según advirtió la ministra, supondría “un incremento de costes”, tener que garantizar una “disponibilidad que tendría que ser pagada por todos nosotros”, y la necesidad de “salir a buscar carbón, que en estos momentos también está extraordinariamente caro”.
Sin embargo, Ribera matizó que “en un horizonte como este, en el que tenemos que reforzar los planes de contingencia, tal y como nos recuerda la Unión Europea, es bueno que el operador del sistema que vela por que pueda responderse de forma anticipada a cualquier escenario de riesgo valore si (...) las cosas han cambiando y tiene que introducir alguna limitación adicional al cierre de la central térmica de As Pontes”.
En consecuencia, concluyó que si Red Eléctrica considerara “oportuno” mantener abierta la central, el Gobierno tendría que estudiar “en qué condiciones y cómo se sufraga su disponibilidad”.
La Xunta carga contra la política “improvisada” del Gobierno
El vicepresidente económico de la Xunta, Francisco Conde, reclamó ayer que Gobierno y Endesa “tomen decisiones con claridad y transparencia” sobre un posible aplazamiento del cierre de la térmica de As Pontes y advirtió de que es necesario “saber si se va a mantener su actividad”. La posible reactivación de la central coruñesa es, a juicio de Conde, “una demostración más de una política energética improvisada”. “El Gobierno no quiere tomar decisiones”, recriminó. Para el conselleiro, con la solicitud a Red Eléctrica de un informe se está “buscando una justificación para decidir cómo afrontar las necesidades de España”. A su juicio, tiene que concretarse “una idea muy clara de cuáles son los pasos” a dar. De este modo, aludió a un eventual “problema de desabastecimiento e independencia energética a nivel europeo”. Conde urgió “certezas” para “garantizar que los proyectos” planteados ante la clausura de la térmica “se puedan concretar o materializar”. Entre ellos, figura la apertura de una fábrica de papel tisú por parte de Ence, que ocuparía parte del actual recinto. “Llevamos trabajando los tres últimos años, tenemos proyectos con posibilidades de desarrollarse; lo que se necesita es seguridad jurídica y toma de decisiones”, concluyó.
