Más de 500 personas que trabajan para otras empresas repartidoras tendrían que formar parte de la plantilla de Amazon en Barcelona y no lo son. Así lo concluye una investigación llevada a cabo por Inspecció de Treball, organismo dependiente de la Generalitat de Cataluña, que ha propuesto multar con un total de 5,8 millones de euros tanto al gigante del comercio electrónico como a 17 subcontratadas implicadas en esta dinámica. Las acusa de cesión ilegal de trabajadores.