El proceso de renovación que se ha producido en los últimos años en la cúpula de Inditex está elevando hasta niveles nunca antes conocidos las indemnizaciones que debe abonar a los directivos que abandonan la compañía. Solo en el primer semestre de este año, ha multiplicado por ocho la remuneración de sus consejeros, según la memoria semestral que ha enviado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). La causa de este incremento es, sobre todo, la salida el pasado 1 de abril del anterior presidente ejecutivo, Pablo Isla, que recibió 23 millones en concepto de compensación por su marcha.
Pero no solo en la mitad de este ejercicio han aumentado los pagos por la salida de directivos. El año pasado, la alta dirección —están excluidos de este nivel Pablo Isla, y los dos consejeros delegados que tuvo la multinacional en 2021, Carlos Crespo y Óscar García Maceiras— ganó el récord de 79 millones, tres veces más que un ejercicio antes. Sueldos, incentivos e indemnizaciones están detrás de esta cifra. En remuneraciones por la marcha de ejecutivos desembolsó 10 millones, la cifra más alta de la historia. Una cantidad que superará este año.
Estos 10 millones contrastan con la ausencia de este tipo de gastos desde 2013. La cifra anterior más elevada que pagó por la salida de sus directivos databa de 2005 cuando abonó 6,6 millones. En septiembre de ese año, José María Castellano dimitió como vicepresidente del consejo de administración.
Aunque la empresa no especifica en sus documentos las cuantías que recibe cada responsable en concepto de finiquito, el año pasado, además de directivos intermedios, abandonaron el grupo textil dos históricos y con sueldos elevados. En enero, Antonio Abril Abadín renunció a la secretaría general de Inditex y a la del consejo de administración. Llevaba más de tres décadas junto a Amancio Ortega. En junio se marchó otro histórico, Ramón Reñón, que llevaba en la casa desde 1992 y que desde 2008 era el director general adjunto al presidente. Estaba considerado uno de los hombres de confianza del fundador de la compañía y también renunció de forma voluntaria. Las compensaciones a todos los directivos que se fueron, incluidos Abril y Reñón, durante el año pasado supusieron 10 millones.
Este ejercicio se volverá a batir esta cifra. Solo en el primer semestre, Pablo Isla ha recibido 23 millones por su marcha. De ellos, 3,2 pertenecen a su sueldo anual y casi 20, al pacto entre ambas partes para que el directivo no trabaje para la competencia en los próximos dos años. De los casi 20 millones, los primeros 3,25 le fueron abonados días después de dejar su cargo el 1 de abril, y los otros 16,4 los recibió una vez que la junta general de accionistas aprobó el 12 de julio el acuerdo de su finiquito.
Debido a esta elevada indemnización, la multinacional ha disparado la retribución a su consejo de administración en el primer semestre de este año hasta los 29 millones, una cifra que nunca antes se había dado y que multiplica por ocho la que abonó en el mismo periodo del pasado ejercicio (3,6 millones). De esos 29 millones, 23 corresponden a Pablo Isla. Otros 3,6 están bajo el epígrafe de “otros conceptos”. El resto se los reparten la decena de miembros del consejo de administración. La mayor cantidad la reciben Marta Ortega, como presidenta del grupo textil, que cobra un millón de euros anuales, y Carlos García Maceiras, que gana 2,5.
En total, tanto el consejo de administración (11 miembros) como la alta dirección (23 personas) supusieron un gasto durante el primer semestre de este año de 43,8 millones frente a los 22,2 del pasado ejercicio. Si los altos directivos recibieron 14,8 millones en el primer semestre de 2022, hace un año fueron 18,6. Esta última cifra se debe, según la memoria de la empresa, a que en 2021 se incluyó la variable a largo plazo relativa al primer ciclo (2019-2022) del plan de incentivos. Por este concepto, los 23 dirigentes percibieron en esos 12 meses 27,5, millones, que se dividieron en 13,4 en metálico y 14,1 en acciones de Inditex, equivalente a un total de 648.398 títulos.
La compañía eleva un 18% el gasto en su plantilla
Inditex contaba a finales del pasado año con 165.000 empleados. De esta forma, la plantilla experimentó un incremento de cerca de 21.000 trabajadores con respecto a un año antes. Aumenta la plantilla y también sube la partida dedicada a los salarios. En el primer semestre de este año, abonó 2.206 millones en gastos de personal. Es un 18% más que en el mismo periodo del ejercicio anterior, que también había subido un 17%. Las más de 165.000 personas que trabajan para el gigante gallego pertenecen a 177 países. La presencia de mujeres es mayoritaria (76%), mientras que la media de edad no supera la treintena. Según destacó la compañía en su informe anual, en 2021, el número de personas con contrato indefinido se incrementó en más de 7.000. Como consecuencia, el 81% del personal tenía contrato indefinido. En cuanto al tipo de jornada, el 44% de la plantilla trabaja a tiempo completo y el 56% a tiempo parcial.
