El sector inmobiliario español cerró un buen 2021. Las 40 mayores empresas del sector lograron una facturación agregada de 11.600 millones, un 27,6% más que en 2020, según un estudio elaborado por DKB Informa. Entre ellas, destaca Pontegadea, vehículo de inversión de Amancio Ortega, que cerró el pasado ejercicio en el primer puesto con unos ingresos de 1.970 millones, a través de todas sus sociedades. En esta cifra se incluyen los dividendos cobrados de Inditex y el alquiler de sus activos a nivel nacional e internacional. Con estos números, se posiciona como la inmobiliaria española con más ingresos y dobla en facturación a la segunda clasificada. Su cifra de negocio supone el 17% del total de las empresas del sector. Dobla
Entre las 30 inmobiliarias con más ingresos también aparece, en el puesto 27, otra coruñesa, Avantespacia, la compañía del fallecido fundador de Fadesa, Manuel Jove, que reportó unas ganancias de 108 millones.
La mejora en la cuenta de resultados de todas las compañías se debe en buena medida, según el informe, a la reactivación del sector, después del parón vivido durante los meses de la pandemia, que siguieron arrastrando sus consecuencias el pasado año. Solo las 10 primeras empresas cerraron ventas por valor de 7.012 millones (casi 2.000 fueron de la compañía del fundador de Inditex), las 20 primeras, por 9.598 y las 30 primeras, por 10.843.
“Superado el impacto negativo de la pandemia del Covid, el sector inmobiliario recuperó la tendencia alcista, con un fuerte repunte de la inversión en un contexto de alta liquidez y bajos tipos de interés”, señala el autor del informe. Los buenos datos del pasado ejercicio se explican con el aumento en la producción de viviendas y de otro tipo de edificaciones, como oficinas, hoteles o naves logísticas.
El sector inmobiliario español está configurado por 194.000 sociedades, el 95% de ellas con menos de tres trabajadores. “Solo un centenar de compañías contaba con 50 trabajadores o más. El sector presenta una elevada atomización de la oferta, contando con un alto número de pequeñas empresas en plantilla”, apuntan desde DKB.
Tras Pontegadea, Neinor Homes fue la segunda inmobiliaria en facturación con 914 millones, seguida de Coral Homes, con 87, según notificaron las propias compañías a la Comisión Nacional del Mercado de Valores. La cuarta promotora con mayores ventas fue Aedas Homes, con 766 millones, y la quinta, Vía Célere, con 582, según afirmaron en un comunicado de prensa enviado en marzo. Completa el ranking de las grandes promotoras Metrovacesa, propiedad de Banco Santander y BBVA, que cerró con 510 millones.
La compañía del fondo norteamericano Oaktree, Culmia, ingresó 295 millones en el pasado ejercicio. En el caso de la de Bain Capital, Habitat Inmobiliaria, comunicó una facturación de 221 millones. La compañía vasca Amenabar logró ventas por valor de 275 millones, según sus cuentas auditadas por PwC y recogidas por InfoCif. De las más pequeñas, la francesa Premier España suma 117 millones en ingresos.
Los servicers, compañías creadas tras el estallido de la burbuja para vender los activos tóxicos de la banca, son otro tipo de empresas con altos ingresos. En esta tipología, CaixaBank se posiciona como uno de los jugadores más relevantes, a través de sus filiales, algunas de ellas aliadas con el fondo norteamericano Lone Star. Coral Homes facturó 877 millones, Servihabitat cerró 2021 con ventas por valor de 239 millones y Buildingcenter ingresó 284.
Una empresa pública, la Sociedad de Infraestructuras y Equipamientos Penitenciarios de la Seguridad del Estado se cuela entre las más grandes, con unos ingresos de 335 millones, según Infocif. Esta empresa, controlada por el Gobierno, se encarga de la venta de los bienes y centros penitenciarios que, desafectados de los fines penitenciarios, le son aportados al Estado.
No es la única entidad propiedad de la Administración pública en el ranking. La sociedad anónima Valladolid Alta Velocidad 2003, participada por Adif, Renfe, la Junta de Castilla y León y el Ayuntamiento de Valladolid, se constituyó para el desarrollo de las obras derivadas de la transformación de la Red Arterial Ferroviaria de Valladolid. Según InfoCif, facturó el pasado año un total de 218 millones.
