¿Cómo notaremos 2023 en el bolsillo?

Tras un 2022 con la inflación en máximos en tres décadas, el nuevo año se estrena con más medidas para paliar el golpe

¿Cómo notaremos 2023 en el bolsillo?

¿Cómo notaremos 2023 en el bolsillo? / A. S. / S. L. / P. A. / P.C. / G. U.

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La cuesta de enero en 2023 podría aún ser más pronunciada de lo que será por el efecto de las medidas aprobadas por el Gobierno para paliar los efectos de la inflación. En tasa general se ha ido moderando hasta situarse en el 5,8% en diciembre. El punto más elevado del nivel general de precios se alcanzó en julio, con el 10,8%. Con posterioridad, se ha ido reduciendo; pero ahora el problema es la cesta de la compra. Según los datos adelantados por el Instituto Nacional de Estadística (INE), en diciembre destaca la tasa anual de inflación subyacente (la que excluye la energía y los alimentos no elaborados y que muestra la tendencia de los precios a medio plazo), con un aumento de ocho décimas con respecto a noviembre, hasta el 6,9%.

De ahí el paquete anticrisis adoptado por el Gobierno, encaminado a que se noten un poco menos en la cartera los mordiscos producidos por el coste de la cesta de la compra, las facturas de la luz y el gas o los transportes públicos. En conjunto, este nuevo plan costará unos 10.000 millones de euros, que se sumarán a los otros 35.000 movilizados a los largo de 2022, según explicó el propio presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.

El real decreto ley, que deberá ser ratificado por el Congreso durante enero, suprime el descuento de 20 céntimos para todos los usuarios y lo concentra en el transporte y el sector primario. A su vez, elimina el IVA del 4% de los productos más básicos, que van del pan a los huevos, y rebaja el del 10% al 5% para los aceites y las pastas alimenticias. Además incluye un cheque de 200 euros en un solo pago para ayudar con la cesta de la compra a hogares vulnerables. También mantiene las rebajas fiscales para abaratar las facturas de luz y gas y el tope del 2% en la actualización de alquileres y prorroga seis meses los contratos que vencen, con las mismas condiciones.

El precio medio diario de la electricidad en el mercado mayorista ha cerrado 2022 como el más caro de la historia, a una media de 209,94 euros por megavatio-hora (MWh), tras duplicar las cifras del año anterior, cuando fue de 111,95 euros por MWh. Si bien el último mes del año ha sido el más barato, tras enganchar varias semanas con precios preguerra de alrededor de 50 euros por MWh por la alta generación renovable (y por tanto, baja producción con gas) y la menor demanda por las temperaturas moderadas para lo que suelen ser estos meses. En 2023 se prevé que la tendencia sea similar. Según el experto en factura de la electricidad y consultor de Menta Energía, Francisco Valverde, la previsión de cara a 2023 resulta en un precio medio de 195,7 euros por MWh.

El Gobierno fijó un tope al precio del gas que se usa para generar electricidad de 40 euros por megavatio-hora a mediados de junio, que ha conseguido contener los precios de la electricidad en los últimos seis meses, según coinciden los expertos. Las divergencias están en el cuánto porque es difícil saber cómo se comportaría el mercado sin este mecanismo. Por el momento, la denominada excepción ibérica ha permitido que en España desde el 15 de junio, la media del mercado mayorista se situó en 80 euros, mientras en Francia, Italia y Alemania fue de 320, 354 y 282 euros, respectivamente.

El precio de la materia prima supone entre el 40% y el 50% de la factura del gas de los consumidores domésticos, en función de si se incluye la calefacción o no. En el caso de las pymes supone el 67% y para la industria el 80%. Al coste de la materia prima se suma el del IVA (hasta el próximo 31 de diciembre reducido al 5%) y los costes regulados asociados al punto de suministro. La tarifa más asequible para consumidores domésticos y pymes —según la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), el Gobierno y las organizaciones de consumidores como la OCU y Facua— es la Tarifa de Último Recurso, conocida como TUR, que regula el Gobierno.

El Ejecutivo la intervino en septiembre del año pasado para contener el alza del precio de la materia prima, que se actualiza cada trimestre si sube o baja más de un 2%, a un máximo del 15%. A partir del 1 de enero y hasta el 31 de marzo, esta tarifa subirá de media el 8,67% respecto a la actual, según cifras facilitadas por el Ministerio para la Transición Ecológica. Así, para un cliente con un consumo bajo el alza sería del 7,54%, para los de un consumo medio del 8,94% y para los de un consumo alto del 9,21%. En ambos casos, el precio es muy inferior a lo que se pagaría en el mercado libre, en el que las compañías aplican revisiones al alza .

El euríbor, que mide el tipo medio que se cobran los bancos entre sí por prestarse dinero y al que están ligadas la inmensa mayoría de hipotecas a tipo variable en España, ha vivido en 2022 una escalada sin precedentes desde su creación en 1999. El índice, que se movía en diciembre de 2021 en mínimos históricos (-0,502%), se ha disparado y cerrado en diciembre por encima del 3% por primera vez desde finales de 2008.

El Banco Central Europeo (BCE), cuyos movimientos trata de anticipar el euríbor, indicó hace unos días que prevé seguir elevando tipos (los ha llevado ya al 2,5%, tras 11 años sin elevarlos), con lo que es más que previsible que la referencia hipotecaria siga al alza. El servicio de estudios de Bankinter, por ejemplo, acaba de incrementar su previsión del euribor hasta el 4% en diciembre de 2024. Las cuotas hipotecarias llevan todo el año al alza y, entre noviembre y mediados del año que viene, van a subir aún más. Aunque hay créditos para la compra de vivienda a tipo variable que se revisan cada seis meses, la mayoría lo hacen una vez al año.

Según el Instituto Nacional de Estadística (INE), los productos alimentarios estaban un 15,3% más caros en noviembre que un año atrás. Y eso siguió según los datos adelantados de diciembre, ya que frente a una tasa anual general del 5,8%, la subyacente (que excluye la energía y los elementos no elaborados, los elementos más volátiles) escaló hasta e 6,9% por la cesta de la compra. Esto significa que la alimentación se encarece por encima del coste de la vida en general.

Por ello, el Gobierno ha decidido suprimir desde el 1 de enero el IVA del 4% en el pan, las harinas panificables, las leches, los quesos, los huevos, las frutas las verduras, las hortalizas, las legumbres, los tubérculos (patatas) y cereales y rebajar del 10% al 5% el de los aceites y pastas. La medida se mantendrá hasta el 30 de junio o hasta que baje la tasa anual de inflación subyacente. El otro apoyo consiste en un cheque de 200 euros en pago único para las rentas inferiores a 27.000 euros anuales y un patrimonio inferior a 75.000, sin incluir la vivienda habitual. Según un cálculo para una cesta de la compra semanal para una familia de cuatro personas de 122,84 euros se ahorrará unos 3,5 euros.

El Gobierno ha optado por mantener también la apuesta por el transporte público, aunque con cambios. Los abonos de cercanías, Rodalies y media distancia de Renfe seguirán siendo gratuitos en 2023. El transporte urbano e interurbano tendrá una rebaja en el billete del 50% si al 30% que aporta el Estado están dispuestos a sumarle el 20% restante las comunidades autónomas o ayuntamientos hasta el 30 de junio. En lo que respecta al aspecto del surtidor en la gasolinera no habrá mucha diferencia porque el descuento general de 20 céntimos, que el 1 de enero desaparecerá para los conductores no profesionales, se aplicaba al pasar por caja. La mayoría de petroleras han anunciado en todo caso descuentos de unos 10 céntimos.

Los precios se han moderado, después de haber superado los dos euros el litro. El precio medio de la gasolina en la actualidad, 1,565 euros, supera en un 6% al de un año atrás; y el del gasóleo, 1,661, en un 22%. Y es que en junio la gasolina alcanzó una media de 2,128 euros y el gasóleo, de 2,1 euros. Los expertos prevén que el diésel, el más empleado, seguirá registrando subidas debido a la escasez porque una buena parte se importaba de Rusia.

Por su parte, los peajes de las autopistas del Estado subirán el 4%, incluida la AP-9, ya que el Gobierno ha limitado el incremento estipulado por contrato a través del real decreto de medidas anticrisis el alza, que debería ser del 8,4%.

Las pensiones suben un 8,5% y un 3,9% los salarios con convenio en Galicia

El dato del IPC definitivo de noviembre sirvió de referencia para la revalorización de las pensiones en 2023. Finalmente, las prestaciones y el ingreso mínimo vital subirán un 8,5% el próximo ejercicio. El incremento entra en vigor con el nuevo año y los pensionistas ingresarán ya en la nómina de enero su prestación con las tablas actualizadas. Es decir, si la pensión media de jubilación es actualmente de 1.142 euros (según la nómina de noviembre), a partir de enero subirá a 1.238,7 euros, unos 97 euros de incremento medio.

También subirán en la misma proporción todas las pensiones contributivas de viudedad, incapacidad temporal u orfandad. En 2023 será el segundo año en el que rige la nueva fórmula que el ministro de Inclusión y Seguridad Social, José Luís Escrivá, pactó con patronal y sindicatos para revalorizar automáticamente las prestaciones contributivas cada año. Esta es el resultante de calcular la media de la inflación entre diciembre del año anterior y noviembre del presente. Es decir, no se toma como referencia el último dato de IPC disponible, que sería el 6,8% de noviembre ni el 5,8% de diciembre, sino que se realiza la media de las tasas interanuales de los últimos 12 meses. Lo que ha acabado resultando para el próximo ejercicio ese 8,5%.

En cuanto a las pensiones no contributivas, la mínima es de 484,61 euros al mes, una vez de manera extraordinaria el Ejecutivo pactó con EH Bildu subir un 15% estos subsidios. Para 2023, el Gobierno ha prorrogado dicho aumento extraordinario y las pensiones mínimas no contributivas seguirán en esos 484,61 euros mensuales. Mientras, los salarios han sido hasta ahora los principales paganos de la crisis inflacionista. Las últimas estadísticas disponibles de negociación colectiva muestran que los sueldos están creciendo a un ritmo del 2,957% en España y el 3,93% en Galicia, frente a un IPC que en diciembre se ha situado en el 5,8%. Pese a la moderación del nivel general de precios sigue la pérdida de poder adquisitivo que los pronósticos anticipan que se verá recortada, aunque más por el descenso de la inflación que no por un incremento mucho más vigoroso de los sueldos.

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