Congreso tecnológico

4YFN 2023 o el humano (y los emprendedores) como futuro de la tecnología

El salón de las 'startups' dentro del Mobile reivindica en sus primeras horas el potencial de las pequeñas tecnológicas y su papel a la hora de crear una inteligencia artificial útil y segura

Puerta de acceso al 4YFN 2023, en uno de los pabellones del Mobile World Congress.

Puerta de acceso al 4YFN 2023, en uno de los pabellones del Mobile World Congress. / MANU MITRU

Paula Clemente

“Si quieres ir rápido, ves solo; si quieres ir lejos, ves acompañado; y si quieres las dos, crea un ecosistema”. Cita épica para recordar que este encuentro es uno de los mejores ecosistemas del mundo y el 4 Years From Now (4YFN2023 queda oficialmente inaugurado. Sobre el escenario, sus ‘masterchefs’, dice el conductor del acto: el presidente del salónYossi Vardi, y su directorPere Durán, ambos encantados de la estampa que tienen en frente (una sala llena), confiados en el futuro que depara a los emprendedores y a las ‘startups’ pese a la situación macroeconómica y geopolítica global, y con planes de que esto sea solo la antesala de una edición mucho mayor el año que viene. Según confiesa Vardi poco antes de abandonar el escenario, la organización quiere que este salón para las 'startups' asociado al Mobile World Congressocupe en 2024 dos plantas, el doble de espacio que este año.

Esta edición año se exhiben en él más de 700 empresas (casi las mismas que el año previo al covid) de todo tipo de geografías y sectores y en situación muy variada. Pese a que las múltiples delegaciones catalanas (GeneralitatAjuntamentMobile World CapitalBarcelona Health Hub, Universitat de BarcelonaUniversitat Politècnica de CatalunyaUniversitat Pompeu Fabra...) tengan un papel protagonista en este espacio, el resto de 'stands' que agrupan empresas confirman esta variedad: desde AndalucíaAsturias y Valencia, hasta Japón, pasando por AustriaFrancia, los Países BajosGran Bretaña e incluso Ucrania. "No tenemos otra: tenemos que seguir luchando, los soldados en el campo de batalla y nosotros en el área tecnológica", cuenta una de las representantes del fondo de inversión nacional ucraniano que ha seleccionado a las ocho 'startups' que participan en el salón. Su objetivo, que la gente conozca el potencial de los emprendedores en Ucrania y que sigan fluyendo, pese a todo, los proyectos y la inversión.

“Lo más importante de esta edición es que después de 2 años muy duros por el covid podemos decir sin ninguna duda que el ecosistema de ‘startups’ está aquí al completo”, analiza en su discurso inaugural Pere Durán, que aprovecha para señalar las áreas que cree que serán centrales a lo largo de esta semana: el metaverso, la inteligencia artificial y la sostenibilidad.

Prueba de ello es que su conferencia, que se acaba convirtiendo en una inyección de optimismo para los emprendedores (“El ecosistema es lo suficiente resiliente como para navegar todo lo que viene y estoy muy seguro de que las ‘startups’ estarán en primera línea”, lanza este directivo. “Winston Churchill decía que el éxito es ir de un fracaso a otro sin perder las ganas”, completa Vardi), dé paso a otra charla, la primera oficial de esta novena edición del 4YFN, sobre cómo el humano es el futuro de la tecnología. O que el debate que organiza rato más tarde la asociación Tech Barcelona sobre el impacto real de la inteligencia artificial en medio de tanta expectativa acumule una cola en la entrada que casi duplica la capacidad del espacio que la acoge.

El potencial de la inteligencia artificial

“¿Por qué estamos preocupados? Porque nos afecta directamente a nosotros: en toda revolución, la tecnología ha destruido puestos de trabajo y ha desafiado la definición de lo que implica ser humanos”, razona uno de los ponentes, el ingeniero experto en esta tecnología, Josep Maria Ganyet. “No sabemos todavía qué va a pasar, igual que no sabíamos hace diez años lo que ocurriría con los teléfonos o las redes sociales”, plantea este especialista, que recuerda que este último invento estaba diseñado como herramienta de ocio para socializar y ha acabado siendo una de las principales fuentes de desinformación.

A su lado, sin embargo, tres empresas españolas se convierten en ejemplo involuntario de todo lo que puede salir bien: Factica porque utiliza inteligencia artificial para que las empresas puedan hacer mejores previsiones de ventas y, al fin y al cabo, afinar puntería con sus procesos; Mitiga porque ha desarrollado una herramienta para prevenir desastres naturales con esta tecnología; Accexible, porque puede detectar enfermedades con ella.

En cualquier caso, todos ellos confirman que el futuro de esta y tantas otras tecnologías es el humano, que tendrá que trabajar concienzudamente en hallar el modo de que la inteligencia artificial sea la herramienta verdaderamente útil que está llamada a ser, sin sesgos y con muchísima más transparencia a la hora de saber cómo hace lo que hace.