Área de supervisión

El BCE descarta que la zona euro se haya contagiado de la tormenta bancaria

El consejo de supervisión se reúne de forma extraordinaria tras el rescate del First Republic Bank

Andrea Enria, presidente del consejo de supervisión del BCE.

Andrea Enria, presidente del consejo de supervisión del BCE. / Reuters

Pablo Allendesalazar

El consejo de supervisión del Banco Central Europeo (BCE) ha descartado este viernes que los bancos de la euro zona hayan sufrido un contagio de la tormenta bancaria de esta semana, ya que no han experimentado fugas de depósitos y su exposición a Credit Suisse es mínima. Así lo confirman fuentes al tanto de la reunión mantenida por el área del BCE dedicada a la vigilancia de los bancos, un encuentro extraordinario para analizar la situación del sector tras el terremoto en los mercados provocado por las crisis del suizo Credit Suisse y los estadounidenses Silicon Valley Bank (SVB), Signature Bank y First Republic Bank.

"El consejo de supervisión se reúne para intercambiar impresiones y actualizar a los miembros sobre eventos recientes en el sector bancario", se ha limitado a confirmar un portavoz de la institución, tras la noticia adelantada por 'Reuters'. Se trata de un tipo de encuentros monotemáticos y fuera de agenda muy habituales en el órgano que preside Andrea Enria cuando se producen situaciones extraordinarias de volatilidad y tensión.

De hecho, los máximos responsables de la supervisión bancaria de la zona euro -entre los que se cuenta la subgobernadora del Banco de España, Margarita Delgado- ya se reunieron a principios de esta semana, como también lo hicieron en numerosas ocasiones cuando Rusia invadió Ucrania hace poco más de un año.

El breve encuentro ha servido para intercambiar opiniones sobre la situación a través del diálogo y de presentaciones sobre la evolución de los mercados y los bancos. El consejo de supervisión, vía los bancos centrales nacionales, ha recabado en los últimos días información de los bancos sobre su situación y su exposición a las entidades caídas, en general muy pequeña ya que los bancos estadounidenses era regionales, mientras que Credit Suisse lleva dos años con serios problemas, lo que ha dado tiempo al resto del sector a recortar sus conexiones con la entidad helvética.

Informativo más que decisorio

Como es habitual dado el carácter de la reunión, de la misma no ha salido ningún comunicado o decisión. Máxime cuando este jueves ya hubo un encuentro del máximo órgano del BCE, su consejo de gobierno, que es el competente para tomar decisiones de política monetaria (como las subidas de tipos) y también las otras medidas más contundentes en el arsenal del banco central, como aprobar líneas extraordinarias de liquidez.

Pese a las turbulencias financieras, el consejo de gobierno subió los tipos en 0,5 puntos como tenía previsto, pero también quiso lanzar un mensaje tranquilizador sobre la situación de la banca. Así, aseguró estar haciendo un "atento seguimiento de las actuales tensiones en los mercados" y estar "preparado para responder como resulte necesario" para mantener la estabilidad de precios y financiera.

"El sector bancario de la zona del euro tiene capacidad de resistencia y posiciones de capital y de liquidez sólidas. En todo caso, el BCE cuenta con todos los instrumentos de política monetaria necesarios para suministrar apoyo de liquidez al sistema financiero de la zona del euro si fuera necesario y preservar la transmisión fluida de la política monetaria", comprometió, para disipar el temor a crisis de entidades por fugas de depósitos.

Tensión

La caída del californiano Silicon Valley Bank el jueves de la semana pasada ha provocado esta semana unas ondas expansivas en las bolsas que sacudieron el miércoles al desde hace años maltrecho Credit Suisse helvético e hicieron temblar las cotizaciones de los bancos mundiales. La reunión de los supervisores del BCE se produce horas después de que los grandes bancos estadounidenses acudieran al socorro del californiano First Republic Bank, en el que depositaron 28.200 millones de euros para reforzar su liquidez.

En la víspera, Credit Suisse pidió al Banco Central de Suiza también una línea de liquidez por valor unos 50.000 millones de euros. Los datos del jueves mostraron que los bancos de Estados Unidos solicitaron cantidades récord de liquidez de emergencia a la Reserva Federal en los últimos días, aumentando el tamaño del balance del banco central tras meses de contracción.