Saltar al contenido principalSaltar al pie de página

El TSXG anula la licencia de un parque eólico en A Coruña avalado por la Justicia europea

Afecta a las instalaciones proyectadas en el monte de A Ruña, en Mazaricos

J. M. Ramos Lavandeira

Santiago

La sección tercera de la Sala de lo Contencioso-administrativo del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) anuló ayer las autorizaciones administrativas previas y de construcción del parque eólico A Ruña III, situado en Mazaricos. Se trata de la primera sentencia en la que el TSXG se pronuncia, tras las recientes resoluciones favorables del Tribunal Supremo y del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE), sobre las autorizaciones administrativas previas y de construcción de un parque eólico de la comunidad.

Cabe destacar que se trata de una sentencia, por lo que la Sala examina el fondo del litigio, no de un auto en el que solo resuelve sobre la solicitud de la medida cautelar de paralización de dichas autorizaciones. En ese momento procesal —solicitud de medida cautelar— el tribunal no valora el fondo del asunto.

De esta forma, ha acogido el recurso presentado por la asociación Petón do Lobo. En 2024, el TSXG decidió suspender, a la espera de que se resolviese la cuestión prejudicial que había presentado ante el TJUE, el litigio en el que debía decidir sobre la legalidad de las autorizaciones concedidas por la Xunta a la promotora del parque A Ruña III, Eurus Desarrollos Renovables.

Los magistrados basan la anulación en que la declaración de impacto ambiental se limitó al parque eólico cuando se tenía que haber realizado de forma conjunta con la de la línea eléctrica de evacuación. «A Ruña III no solo se configura como una instalación que produce energía eléctrica, sino que también la almacena y transporta hasta la red», pone de manifiesto el TSXG, al tiempo que añade que «se tenían que haber contemplado todos sus componentes en un solo proyecto o, al menos, valorar ambos de forma conjunta en una sola declaración de impacto ambiental».

El segundo de los argumentos estimados por el TSXG es la falta de análisis, en la declaración de impacto ambiental, «para prevenir o, en su caso, mitigar», los daños que el parque eólico podría producir a algunos espacios próximos a la Red Natura 2000.

La sentencia no es firme, pues cabe presentar recurso de casación ante el Tribunal Supremo.

Tracking Pixel Contents