La vicepresidenta del Gobierno y número 2 del PP por Madrid, Soraya Sáenz de Santamaría, ha hecho hoy campaña en Cataluña, donde ha visitado la firma de moda nupcial Pronovias, que en plena campaña de las catalanas amenazó con irse de la comunidad en caso de independencia.

Sáenz de Santamaría, que dedicará la jornada de campaña electoral de hoy a Cataluña, se ha desplazado hasta la sede de Pronovias en El Prat acompañada de la presidenta del PPC, Alicia Sánchez-Camacho, y del líder del partido en el Parlament, Xavier García Albiol.

Los dirigentes populares han sido recibidos por el presidente de la compañía, Alberto Palatchi; su mujer, Susana Gallardo, y sus hijos Gabriela, Marta y Alberto, así como un amplio grupo de directivos y trabajadores de la multinacional.

En un breve discurso de bienvenida, Palatchi ha recordado que Pronovias nació hace cincuenta años en Barcelona y que se ha convertido en una empresa líder en su sector, a la vez que ha logrado mantener su origen familiar.

"Seguimos creando empleo y estamos muy orgullosos de ser marca España y ser marca Barcelona también", ha manifestado el directivo, que ha subrayado que Pronovias es sinónimo de "fábrica de sueños".

Por su parte, la vicepresidenta se ha mostrado "orgullosa" de que Pronovias "se considere un elemento clave de lo que es la marca España", que es "profesionalidad, prestigio, creatividad y buena gestión".

"Pronovias resume lo que somos los españoles y lo que somos capaces de hacer en todo el mundo", ha señalado Sáenz de Santamaría, que ha destacado que los fundadores de la compañía empezaron "prácticamente con nada" y han pasado a representar a España en todo el mundo.

Pronovias es una de las pocas empresas catalanas que han expresado públicamente su rechazo a una posible secesión.

El pasado mes de septiembre, en plena campaña de las autonómicas catalanas, Alberto Palatchi envió un correo a sus trabajadores alertando de que la empresa sería "difícilmente viable" en una Cataluña independiente y que podría verse obligada a irse de la comunidad en un escenario de secesión.

El ejecutivo afirmaba en la nota que su objetivo era seguir manteniendo la sede en El Prat, pero que una victoria independentista en las elecciones -como así sucedió- podría obligarle "a considerar todas las opciones" para asegurar el futuro de la empresa.

El mercado catalán representa actualmente el 3,6 % de la cifra de negocio de Pronovias, el resto de España el 23,1 % y el 73,3 % corresponde a la Unión Europea y al resto del mundo.

Pronovias está presente en más de 90 países a través de 163 tiendas y 4.000 puntos de venta, y cuenta con un equipo internacional de más de 1.000 empleados, de los que 280 aproximadamente trabajan en la sede de El Prat de Llobregat.