Yolanda Díaz seguirá en el Congreso tras lograr un acta por Pontevedra por En Común-Unidas Podemos, que sumó la de Antón Gómez-Reino en A Coruña. En 2016 la alianza había logrado cinco parlamentarios.

¿Condicionan su apoyo a la investidura de Pedro Sánchez a que firme un acuerdo de gobierno de coalición con Unidas Podemos?

La ciudadanía habló y quiere gobiernos progresistas, plurales, en coalición y que sea parecido a Europa, que está gobernada con fórmulas mixtas coaligadas. Esto es imprescindible para tener estabilidad en el Gobierno. No se puede gobernar con 134 votos como tenía el PP, ya lo vivimos, ni con menos, como tiene ahora Pedro Sánchez.

Durante la campaña, daba por seguro un pacto de PSOE y Ciudadanos, que ahora suma mayoría absoluta. ¿Es posible?

Sí. Que en la sede de un partido la militancia pida que no se pacte con Rivera es el mayor indicativo de que hay riesgo. Pactar con él es querer un Gobierno avalado por los poderes económicos. Gobernar en solitario, haciendo caso a la CEOE, es gobernar contra el mandato de la gente. No incorporar a Unidas Podemos al Gobierno es garantía de no bajar impuestos a los trabajadores ni subirlos a los que más tienen, ni abordar las necesidades de Galicia. Se gobierna para los poderes económicos con Rivera de vicepresidente o sin él, pero con apoyos puntuales avalados por la CEOE y el Íbex 35.

¿A qué apoyos aspira para ese Gobierno PSOE-Unidas Podemos?

Unidas Podemos es clave, pero también podemos contar con PNV, el diputado de Compromís e incluso el de Revilla [Partido Regionalista de Cantabria]. Daría perfectamente. Necesitamos tranquilidad y un Gobierno estable. Llevamos tres años y tres elecciones y no es soportable. Si en Moncloa piensan en geometrías variables, puede tener muchos costes.

¿Qué autocrítica hacen tras perder 96.000, incluyendo los de En Marea, y tres diputados en Galicia y una treintena en total?

Autocrítica hacemos siempre, pero hay que esperar para saber qué pasó. Cometimos errores, pero hicimos una buena campaña. Eran unas elecciones excepcionales y la gente votó para derrotar al bloque de la reacción.

¿Cómo explica que hayan pasado de querer "asaltar los cielos" y rozar el 'sorpasso' al PSOE a querer ser su muleta en Moncloa?

Ni lo fuimos ni vamos a ser. Eso son los viejos años 90. Y no tenemos dos diputados, tenemos 42. Somos una fuerte muy potente y con muy poca diferencia con PP y Ciudadanos en votos. Y en ese caso vamos a ser oposición de forma brutal con la gente en la calle.

Ha dicho que el 28-A marca el camino para derrotar a Feijóo y apartar al PP de la Xunta, pero ya no lideran la alternativa. Los ha superado el PSOE. ¿Han desaprovechado la oportunidad?

Todo lo contrario.

¿Con el PSOE con 10 y ustedes dos?

En las autonómicas veremos lo que pasa, queda un año. Unidas Podemos sale a ganar. Somos la segunda fuerza en el Parlamento de Galicia.

Con En Marea, con la que han roto.

Cierto. No quisieron ir con nosotros. Pero uno puede liderar la oposición con menos diputados.

¿Percibe decepción en sus votantes tras tres años de peleas?

Siempre trabajaré por la unidad, quien no la quiso sabrá lo que hizo. Es mejor un mal acuerdo juntos que otra cosa.

¿Pagaron un peaje excesivo?

No me atrevo a decir qué pasó. Creo que es más el periodo de excepcionalidad política que otra cosa porque En Marea sacó 18.000 votos, por hablar claro.

¿Está finiquitado ese proyecto, que es séptima fuerza?

Las marcas per se no operan, son los proyectos.

La irrupción de Ciudadanos puede permitirle al PP mantener la Xunta sin mayoría absoluta. ¿Qué opina de esa opción?

C's no entiende Galicia.

Ha logrado los mismos diputados que ustedes.

C's entra por desplome del PP. Son como extraterrestres aquí.

¿Le tendería la mano a Villares o va a romper el grupo parlamentario?

No lo sé, soy militante de base. Quiero empezar a trabajar en nuestra alternativa de gobierno.

¿Compartiéndola con Villares?

Me dan igual las personas. Me importa el qué.

¿Por qué perdieron tantos votantes?

En la campaña me dijeron muchas veces que tenían miedo. El PSOE concentró voto.

¿Aceptaría ser ministra?

No se trata de eso. Queremos un gobierno que cambie la vida de la gente y que sea gallego.

¿Le plantearon esa opción?

No tiene mucho sentido eso. Solo importa trabajar por Galicia.