El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, pidió ayer a todo el PP, a acudir "hasta el último rincón" a pedir el voto para lograr mayorías y aunque cree que ganarán el domingo, eso "no basta" porque tienen que hacerlo "con toda la fuerza". Rajoy cerró ayer en Valencia el multitudinario y ya tradicional mitin en la plaza de toros de la ciudad, donde arropó a los candidatos a la comunidad, Alberto Fabra, y la Alcaldía, Rita Barberá, en un momento en el que las encuestas auguran una bajada del partido en este bastión del PP.

Rajoy tuvo tiempo de alabar a Barberá y a Fabra. "Eres la mejor", le dijo a la alcaldesa, además de mostrarse convencido de que seguirá al frente del Ayuntamiento a pesar de los que la "insultan", porque vencerá a la "sopa de letras" que quiere gobernar en su lugar. Y de Fabra destacó su "valor, audacia y sentido de la responsabilidad" y señaló que dio "la talla" como gobernante, que se demuestra en los momentos difíciles.

Ninguno de los tres aludió a la corrupción que ha acuciado al partido en esta autonomía, y ninguno, por tanto, se refirió al último escándalo que les ha afectado, el del expresidente provincial Alfonso Rus al que la Fiscalía investiga por un presunto delito de cohecho y ve indicios de enriquecimiento ilícito en función del cargo.

Mariano Rajoy llamó a la movilización de los populares, en un acto en el que aseguró que el PP se ha convertido en "el refugio del sentido común y de la cordura" después de lo que se está "viviendo en toda España" y "sobre todo en esta campaña" electoral. "No somos perfectos, perfectos son todos los demás, que suerte tienen, pero hemos hecho lo que teníamos que hacer en los momentos más difíciles", aclaró. Y añadió que conviene "tomarse en serio al PP", porque es el partido que "ha sacado por dos veces a España del pozo" en el que le dejaron los socialistas, y está siempre para "sacar las castañas del fuego".

El líder de los populares insistió en que cada voto al PP es un voto "para mejorar la vida de la gente", pero también para decir "con claridad y nitidez que queremos seguir avanzando y no volver atrás". Y, por el contrario, avisó de que cada voto que no consiga su partido será un voto "perdido para el empleo, dedicado a otras cosas y perdido para la estabilidad".

Mariano Rajoy recordó que los años de gestión de su gobierno y de los del PP en comunidades y ayuntamientos "han sido muy duros", tanto para los gobernantes como para los españoles. Por eso, ahora que "hay base para afrontar el futuro con optimismo", alerta de que ya "no se puede volver atrás" y España "no puede repetir" la "pesadilla" vivida por la "incompetencia" de los socialistas para hacer "una política económica a la altura".

Por la mañana, Rajoy ha estado en un acto en Logroño junto al presidente autonómico, Pedro Sanz y la alcaldesa de la ciudad, Concepción Gamarra. También allí el presidente afirmó que el reto para los próximos años es "gobernar para las personas", lo que requiere "voluntad, competencia, eficacia, buenas políticas y, sobre todo mucha cordura". "La buena voluntad la tenemos todos, sea del partido que sea pero eso no es suficiente porque para gobernar se necesita eficacia", indicó.