El mensaje político ha de adaptarse a las formas de comunicarse de la sociedad, por lo que debe prestar mucha atención a las redes sociales e internet. Algunos políticos así lo hacen, las usan como herramienta de campaña a la presidencia de la Xunta; otros, en cambio, lo ven como un mero complemento. En Twitter, la red social preferida por los internautas para hablar de política, los expertos destacan la cuenta de Ana Pontón como la más efectiva entre los candidatos, mientras que la de Alberto Núñez Feijóo, es la peor.

El prototipo de electorado de cada partido determina el papel que juegan las redes sociales en la comunicación del mensaje. El PP gallego tiene votantes de mayor edad, conservadores, por lo que internet es un canal secundario en su campaña. "Será en la distribución de los votantes de izquierdas, debido a su perfil más joven y urbano, donde cabe espera un mayor impacto de Internet en el resultado electoral", señala Jesús Manuel Benítez, experto en el impacto político de las tecnologías de la información y comunicación.

Feijóo gestiona peor su perfil social que el resto, según Xavier Martínez, experto en comunicación Audiovisual y redes sociales. "Conversa muy poco con sus seguidores, casi todo son retuits y tiene un uso muy institucional". En agosto no contestó ni una sola mención y en lo que va de septiembre solo a una, la peor estadística entre los candidatos a pesar de tener el equipo más amplio. "No se quieren arriesgar, son los que más tienen que perder y saben que ahí no está su público", apunta Martínez.

Su mayor error ha sido estar desde 2012 sin usar su Twitter y reactivarlo a pocos meses de las elecciones gallegas. "Cambiaron el nombre de usuario, eso fue inteligente porque así mantiene los seguidores que ya tenía -ahora dispone de 10.100-, pero es un descrédito". Pero no todo lo hacen mal en el PP. Martínez alaba el uso de las infografías: "Son la mejor manera de llegar a la gente porque se consumen muy fácil".

Las imágenes son también la clave de las cuentas de Luís Villares y Ana Pontón, así como de los perfiles de sus partidos, En Marea y BNG, respectivamente. Benítez enfatiza la efectividad de los vídeos de la líder nacionalista con diferentes personajes populares de Galicia. "Logra transmitir una imagen de cercanía". Cree que es la que mejor ha sabido posicionar su perfil en Internet. Pontón lanza unos 10 mensajes al día en Twitter y contestó al 14,5% de menciones en agosto. Martínez coincide en que es de las que más se vuelca. Tiene más de 6.600 seguidores.

Debido al perfil de votante joven y urbano de En Marea, se podría esperar que Villares fuese el de mayor interacción; sin embargo, a los expertos les llama la atención que su actividad haya descendido desde el inicio de la campaña, porque quizás gestionar él mismo su cuenta. En agosto escribió 18 tuits al día y solo contestó al 4,5% de las menciones. Con casi 5.500 seguidores se ha visto superado por la candidata de Ciudadanos, Cristina Losada con más de 6.500.

El candidato del PSdeG, Xoaquín Fernández Leiceaga, se queda sin casi efectividad en la Red. Benítez ve positivos los vídeos que lo presentan como candidato porque lo muestran como una persona cercana. En Twitter cuenta con dos perfiles, uno personal con casi 2.200 seguidores y otro como candidato con cerca de 1.400. Desde este último está subiendo el número de tuits y ya duplica los de agosto, con 14 al día. Pero tiene algunos problemas. Su cuenta personal la ha descuidado para impulsar la de campaña y ha perdido el tono personal que sí tenía su otro perfil.

La candidata de Ciudadanos tiene el nivel de contestación más elevado en agosto (30,3%) y es la tercera candidata con mayor número de seguidores: supera los 6.500. Sin embargo, los expertos señalan que casi que se limita a contestar mensajes positivos.