Gonzalo Caballero interpreta señales a su favor para reeditar la llegada a la Presidencia de la Xunta de su partido, el PSdeG, en 2005, año en el que el PP de Manuel Fraga perdió la mayoría absoluta por un escaño. Un año antes, Zapatero había llegado a la Moncloa desde Madrid y el poder insufló viento en las velas socialistas, el mismo impulso que el secretario xeral del puño y la rosa en Galicia quiere recibir de Pedro Sánchez, que este domingo desembarca en la comunidad por segunda vez en campaña. El apoyo desde el Ejecutivo llegó de la mano del ministro de Sanidad, Salvador Illa, que apeló precisamente a un cambio similar al de hace quince años para romper "la inercia" y plasmar en las urnas "lo que es un clamor". "Tiene que haber un cambio", resumió, "para dar prosperidad a esta tierra, para afrontar los problemas y romper una inercia que va haciendo un lento decaimiento", informa Europa Press.

Los socialistas llegaban a las elecciones con una inercia positiva tras un crecimiento en las municipales, recuperando las tres ciudades coruñesas, y unas generales en las que llegaron a adelantar al PP, que volvió a situarse como primera fuerza en noviembre por un pelo. La pandemia lo cambió todo, hasta el punto de que se aplazaron las elecciones.

Illa consideró que "hasta el final el resultado está abierto y, en una democracia, el resultado depende de lo que cada ciudadano meta en la urna a través de una papeleta" y reconoció que la gestión de la crisis pesará en la elección de la papeleta, aunque pidió centrar el foco. "La gente tiene que valorar cómo han ido las cosas, cómo se han gestionado las cosas, pero sobre todo, quién quiere que gobierne", resumió.

Por su parte, Caballero, acompañado del alcalde de Santiago y otros miembros de su partido, incidió en vincularse con el Gobierno de España. Su mensaje es claro: quiere importar el modelo de políticas que aplica Pedro Sánchez, que gobierna en coalición con Unidas Podemos, a Galicia. "Estamos orgullosos de que un Gobierno primase la defensa de la salud pública por encima de cualquier decisión en momentos de enorme dificultad a nivel político, personal y sanitaria", indicó ante los medios.

Su discurso guardó también la réplica al mensaje de la Xunta y del candidato del PP a la reelección como jefe del Ejecutivo, Alberto Núñez Feijóo, que ensalza su anticipación a la crisis como explicación para el menor impacto de la enfermedad Covid-19.

Aseguró que el virus llegó a Galicia "quince días más tarde" y tuvo una circulación del 2% frente al 11% de Madrid (donde gobiernan PP y Ciudadanos). "Si no se hubiese aprobado el estado de alarma, el ritmo de contagios en Galicia podría haber sido mucho más alto", destacó Caballero.

También prometió convocar 5.000 plazas estables para profesionales sanitarios como forma de defender el Estado del Bienestar y comparó la gestión del bipartito PSdeG-BNG con la del PP de Feijóo, cuyos inicios estuvieron marcados por la crisis financiera.