La candidata del BNG a la Xunta, Ana Pontón, desveló ayer cuáles serán sus primeras medidas si llega a la presidencia, entre las que anunció la creación de una Secretaría Xeral de Reconstrucción que dependa directamente de ella para abordar las actuaciones de recuperación de la crisis sanitaria y "levantar al país". "Quiero ser una presidenta en la que los gallegos se sientan representados y estamos, desde ya, pensando en la arquitectura institucional y en las primeras medidas de gobierno para abrir una nueva etapa de esperanza. Si confiamos en nuestras propias fuerzas, saldremos adelante", proclamó con la catedral de Santiago como fondo del acto electoral.

Pontón avanzó que la primera medida será poner en marcha un "gran acuerdo de país para la reactivación económica", en el que, indicó, tienen que estar presentes "todas las partes de la sociedad: sectores económicos, sociales, ayuntamientos, sindicatos y universidades". "Tenemos que unir al país para reactivar la economía para lograr ese gran acuerdo", dijo.

Otra de las primeras medidas será habilitar una estrategia para la "intervención pública de Alcoa", para continuar en Galicia la producción de aluminio, todo ello enmarcado en un plan de reindustrialización para el periodo 2020-2030.

Asimismo, será eje de su gobierno un plan estratégico centrado en el apoyo a la ciencia y a la innovación, con medidas vinculadas a un nuevo modelo productivo, con el objetivo de que también "pueda retornar al país toda esa juventud que tuvo que emigrar". "Para que Galicia se levante de la crisis", enfatizó.

Pontón también señaló entre las primeras medidas una nueva política lingüística, que pasa por eliminar el "decreto de la vergüenza" y, desde el consenso, poner en marcha una nueva actuación que sitúe a la lengua propia como factor no solo de identidad o cultural, sino como una ventana al mundo de la lusofonía. "Es una importante oportunidad desde el punto de vista económico", sostuvo.

Además, Pontón dijo que otra de las actuaciones prioritarias será convocar la comisión mixta de transferencias, para conseguir para Galicia las competencias recogidas en el Estatuto y abrir una ponencia parlamentaria para definir una "ampliación del marco competencial" que permita aumentar "el poder político de este país".

"Tenemos que confiar en la potencialidad de este país. Somos capaces de levantarnos de esta crisis", enfatizó Pontón, quien, por ello, aseguró que Galicia "necesita que el próximo gobierno esté liderado por el BNG, como garantía de poner en marcha un nuevo proyecto de país". "Nos estamos jugando el futuro", comentó, para incidir en la necesidad de "nuevas ideas y nuevos liderazgos".

Estas primeras medidas se enmarcan dentro de los cinco "ejes fundamentales" en torno a los que giraría el Ejecutivo nacionalista: el eje social, el económico, el medio ambiente y el territorio, la innovación y el autogobierno. En el plano económico, la prioridad del BNG es que la Xunta sea "el motor del país" que permita avanzar hacia un nuevo modelo productivo, con una apuesta por una economía verde y circular y una industria sostenible y eficiente que permita "poner en pie" a Galicia, que no solo está tocada por esta crisis, sino por la que arrastra desde 2008.