El argumento del voto útil y el miedo se combinaron ayer en el discurso del líder del PSdeG, José Ramón Gómez Besteiro, para alertar a quienes desean relevar al PP de Moncloa. "El voto al PSOE el día 20 es la única forma de no arrepentirse de lo votado el día 21", clamó durante el mitin celebrado en Pontevedra, posterior a otro discurso en Ribadavia.

Sus siglas resultan la única apuesta segura, alegó, contra "la coalición de derechas" de PP y Ciudadanos y frente a un Podemos -aliado en En Marea con IU y Anova en Galicia- que solo busca "restarle votos al PSOE". Ahí afinó la retranca. "Son como abrir una caja de bombones, porque nunca sabes lo que te va a tocar", dijo recordando la película Forrest Gump. Besteiro criticó la "indefinición" de los llamados partidos emergentes, y arremetió contra Ciudadanos y las mareas, a los que acusa de estar "permanentemente especulando".

El líder de los socialistas gallegos recalcó que "el único que puede protagonizar el cambio" que los ciudadanos demandan es el PSOE, frente a formaciones como Ciudadanos que, en Galicia, "no existen ni quieren existir".

A ese respecto, Besteiro recalcó que los candidatos del partido naranja "no apoyan a Galicia" y van a tener una "contestación clara" de los gallegos en las urnas. "Es imposible hacerlo peor en una campaña", sentenció.

En relación a En Marea, subrayó su grado de "indefinición". "No sabemos quiénes son, qué van a hacer ni con quien", afirmó el secretario xeral del PSdeG, quien advirtió de que la campaña electoral "no es para especular" y "hay que ser claro en las propuestas y objetivos", mientras que Ciudadanos y En Marea "están permanentemente especulando".

Gómez Besteiro subrayó que, en estos últimos días antes de los comicios, tiene la percepción de que hay "un apoyo cada vez más creciente al PSOE", y que la gente comprende que el cambio solo es posible de la mano de Pedro Sánchez. "Las coaliciones de derechas no representan el cambio", insistió, y pidió el voto para los socialistas "para que no tengamos que arrepentirnos todos el 21 de diciembre".

Cada partido sostiene que está remontando durante la campaña. Los socialistas se remiten al cara a cara entre Mariano Rajoy, candidato del PP a la reelección, y Pedro Sánchez, cabeza de cartel del PSOE, en el que este espetó al primero que no era decente con una retahíla de alusiones a los casos de corrupción en las filas populares durante la legislatura, como Bárcenas, Gürtel, Rato o Púnica, entre otros.

En ese debate, Besteiro salió a colación cuando Rajoy se revolvió contra los ataques de Sánchez. "¿Pero qué quiere, que le hable de los ERE o del secretario general de Galicia, imputado por prevaricación y cohecho?", atacó.

El líder del PSdeG respondió ayer y le recordó a Rajoy que él no se presenta al Congreso y le pidió fijarse "un poco más" en su propio partido, si bien Sánchez citó dirigentes imputados por corrupción que tampoco concurren a los comicios. "Si todo lo que tiene que decir Mariano Rajoy es eso, la verdad es que bien poco puede aportar en esta campaña", afirmó en Santiago.