El paseo del presidente del PP de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, por la plaza de Lugo se saldó ayer con muchas fotografías, apretones de manos, regalos de bolígrafos y material de campaña, alguna que otra queja y, al menos, una promesa de voto. Junto a Feijóo recorrieron también el mercado el cabeza de lista al Congreso por A Coruña, Miguel Lorenzo, y el presidente provincial, Carlos Negreira.

"Es usted muy guapo", le dijo ayer al también presidente de la Xunta una placera, tras su puesto de pescado y marisco. Sobre la cabeza llevaba una diadema con unos cuernos amarillos que llamaron la atención del presidente. En cuanto ella lo vio acercarse le espetó: "Tiene que mirar por los autónomos, por favor, que estamos muy mal, que nos pongan el paro", reclamó.

Ambos hablaron sobre la diadema que se había puesto la pescadera para dar un toque navideño no solo a su puesto sino también a su indumentaria de trabajo. "Hay cosas que es mejor no saber", acabó diciendo el presidente. Otra pescadera transmitió a los candidatos del PP y a Feijóo sus dudas y el hartazgo que le provoca la política. "Olvídate del debate y fíjate en lo que se hace", le aconsejó el presidente del PP gallego.

En su visita, Feijóo se interesó por precios y productos frescos que llevan la etiqueta de la marca Galicia Calidade, y aseguró a las profesionales que "no vende nada el pesimismo". Una de las placeras le dijo a los políticos que cerraban con este paseo el último día de campaña: "Hay que mirar a la izquierda también" y una compañera apostilló que no tenían pescado. "Es una ruina. Estamos a velas vir aquí", sentenció. El presidente se detuvo a atarse los cordones de un zapato ya fuera del mercado, en la plaza de Lugo, donde un vecino aprovechó la parada para decirle que era "raro verle" por allí, a lo que Feijóo respondió: "Vengo por aquí pero cuando está todo cerrado", en alusión a que frecuenta la ciudad, pero de noche, fuera del horario comercial.

El paseo tuvo una parada más, inesperada. En la plaza de Lugo estaban también las concejales socialistas Yoya Neira y Silvia Longueira, en compañía de la también socialista María José Cebreiro. "La oposición es buena de vez en cuando, sobre todo si el Gobierno es mejor que la oposición", le dijo Feijóo a las concejales.