El espacio de la confluencia política que en las últimas municipales dio la sorpresa en A Coruña bajo las siglas de la Marea Atlántica volvió a saborear ayer el éxito por segunda jornada electoral consecutiva y extiende su influencia al conjunto de la provincia. Con un total de 6 diputados en la comunidad, la coalición que integra a Podemos, Esquerda Unida y Anova dio ayer a Galicia el primer grupo parlamentario propio de su historia en el Congreso de los Diputados de Madrid.

El resultado se tradujo en alegría en el cuartel general de la formación, en la plaza del Humor, donde un grupo de simpatizantes seguía el escrutinio realizado en directo por el Ministerio del Interior a través de un proyector. El diseño de la sede representa el momento que le ha tocado vivir a este movimiento: paredes de cristal y suelo de moqueta, metáfora de la transparencia que prometen abanderar y de las cuotas de poder y despachos que les está tocando asumir.

Aunque la ilusión anticipada por las encuestas fue inicialmente aplacada por los primeros momentos del escrutinio, que situaban a En Marea como tercera fuerza más votada en Galicia, los aplausos llegaron cuando se logró el segundo diputado por A Coruña y, sobre todo, cuando se aseguró la obtención de un acta por Ourense, confirmando el adelanto al PSOE como principal alternativa de oposición al PP.

El goteo de simpatizantes de la coalición por el local continuaba a medida que avanzaba el recuento. Aunque satisfechos por el resultado en Galicia, algunos reconocían tener mayores expectativas para Podemos en el conjunto del Estado después de que se confirmase que el sorpasso al PSOE de Pedro Sánchez no sería posible, ni en porcentaje de voto ni en diputados.

Pasadas las 22.00 horas hacía acto de presencia en la sede el número uno de En Marea por A Coruña, Antón Gómez-Reino Tone, acompañado por el alcalde, Xulio Ferreiro. Recibido con una ovación de los simpatizantes, el nuevo representante en Cortes a partir de enero hizo una lectura "muy positiva" de unos resultados que a su juicio confirman la "consolidación" del paso dado en mayo por las mareas municipalistas. "Decíamos en campaña que En Marea era el elemento de cambio y parece que la ciudadanía lo está interpretando también así", afirmaba antes de recalcar que Galicia contará por primera vez con un grupo de diputados exclusivamente gallegos.

Al local también se acercaron varios de los concejales del actual Gobierno local. Allí estaba la edil de Igualdade e Diversidade, Rocío Fraga, la responsable de Medio Ambiente, María García, o la de Facenda, Eugenia Vieito. Quedaba en ese momento casi un 30% del recuento por efectuarse y todavía se desconocía, por ejemplo, la entrada como senador de José García Buitrón, exdirector del Chuac y uno de los aspirantes de la coalición por A Coruña. "A falta de acabar el escrutinio, la sensación es muy buena y hay que aspirar a pelear por ampliar al máximo la representación en A Coruña y en otras provincias", indicaba Gómez-Reino.

Con este resultado sobre la mesa y con la duda, todavía sin resolver, de quien gobernará España durante los próximos cuatro años, el espacio de las Mareas comienza a mirar también hacia las elecciones gallegas, que se celebrarán en 2016. "Van a ser las elecciones de Marea o Feijóo. No tenemos dudas de que el espacio que estamos construyendo será la alternativa evidente de cara a las autonómicas", indicó. Sobre un posible adelanto, Gómez-Reino dejó en manos del actual presidente del Gobierno gallego la decisión de poner fecha a los comicios. "Feijóo será quien deberá clarificar su futuro".

Preguntado por los periodistas, el candidato de la coalición de "unidad popular" también se refirió a los resultados del BNG, con quien antes de la campaña se intentó llegar a un acuerdo de integración, que finalmente fracasó. El Bloque, que concurrió bajo las siglas de NÓS-Candidatura Galega -lista en la también participaban fuerzas minoritarias como Coalición Galega o el Partido Comunista do Povo Galego- obtuvo unos resultados pírricos, no llegando a captar el 3% de los votos emitidos en la ciudad. "Ellos decidieron recorrer un camino en solitario y a ellos les compete valorarlo", señaló Gómez-Reino.

Pero el resultado de estas generales tiene también una lectura en clave local. Igualando prácticamente el nivel de apoyo de los comicios que encumbraron a Xulio Ferreiro a la Alcaldía, el regidor se mostró ayer "muy satisfecho" por constatar que el espacio ocupado por Marea Atlántica se consolida en toda la comunidad. Los resultados en la ciudad, donde el PP apenas saca 1.000 votos de diferencia a En Marea, son para Ferreiro la evidencia de que existe "un gran apoyo" a su gestión en María Pita.

La candidatura de unidad popular municipal amplía su influencia con la entrada de esta coalición como grupo en el Congreso. El Gobierno local contará ahora, indirectamente, con un altavoz para hacer oír sus reivindicaciones en las Cámaras baja y alta. Gómez-Reino, de hecho, manifestó en una entrevista en campaña con este diario que emplearía su presencia en Madrid para "defender los intereses del Gobierno del cambio" coruñés.

En este sentido, Ferreiro se mostró cauto a la hora de valorar el resultado en el conjunto de España pero destacó la importancia de tener "un aliado en Madrid". "Sin embargo, todavía no sabemos quien será presidente ni que gobierno saldrá de este Parlamento", recalcó.