La campaña electoral hace su aparición hoy en el pleno municipal de Cambre. El debate entre partidos se escenifica hoy entre Unión por Cambre (UxC) y Alternativa dos Veciños. Aunque la lucha sobrepasa las fronteras del ayuntamiento. Y es que el alcalde cambrés, Óscar García Patiño, lleva a la sesión una propuesta para exigir al partido creado por el regidor oleirense, Ángel García Seoane, que se retracte de sus "calumnias" sobre el proyecto de O Graxal o denunciarlo a la Junta Electoral y los tribunales.

El desarrollo junto a la carretera Nacional-VI y a la casa da Cultura Vila Concepción, que incluye locales comerciales y una zona verde, fue objeto de crítica por parte del partido de la margarita a través de unos folletos que, denunció García Patiño, se distribuyeron en domicilios de O Temple y en el que se vierten "graves manifestaciones" contra la corporación. El partido del oleirense calificaba, según el regidor, de "pelotazo urbanístico" la operación y decía que "atentaba contra la legalidad vigente".

El regidor de Cambre defiende que la modificación puntual de las normas subsidiarias que permiten las obras se aprobaron de modo provisional en el pleno del 28 de marzo y apunta que ya cuenta con el visto bueno del Ministerio de Fomento o la Xunta. Acusa a Alernativa dos Veciños de "mentir" y "embaucar" a los vecinos mientras que este partido critican que se llevara el asunto a la sesión "a dos meses de las elecciones, por si acaso no pudieran aprobarlo después".

Lucha de egos

Tan dentro está de la campaña el asunto que ayer, en un mitin, la candidata a la Alcaldía por Esquerda Unida, Olga Santos, criticó las actitudes de ambos dirigentes. Ante los vecinos de O Graxal, en el polideportivo, acusó a los dos de protagonizar una "lucha de egos" y criticó que la propuesta del alcalde cambrés porque, dice, "quiere que le paguemos un equipo de abogados para defender sus intereses personales". También tuvo munición para García Seoane, al que advirtió de que "no necesitamos que venga nadie de fuera a explicarnos lo que es un pelotazo", aunque critica que el proyecto es una "amenaza" para los comercios de la zona.