Hace poco más de cuatro años recibí una llamada telefónica tempranera, cuando aún estaba en la cama. Era mi antiguo y buen amigo Gelo que me proponía incorporarme a la candidatura para las elecciones municipales que iba a presentar en A Coruña Alternativa dos Veciños. No tuve que pensarlo dos veces y le contesté inmediatamente que podía contar conmigo. Al tomar esta decisión tuve en cuenta dos cosas. La primera fue que siempre estuve relacionado con Alternativa desde el momento de su constitución, en 1979, y seguí con orgullo su gestión a lo largo de todos estos años en el municipio de Oleiros. La segunda fue que, tras trabajar 36 años en el Ayuntamiento de A Coruña, hasta mi jubilación en 2013, creía reunir conocimientos que me permitirían realizar un trabajo digno como concejal, en caso de conseguir ser elegido. Quedaban muy pocas fechas para las elecciones y nos centramos en elaborar un programa que contemplaba soluciones para los principales retos a los que tendría que hacer frente la ciudad en los cuatro años siguientes. Nos conocimos los que formábamos parte de la candidatura y nos entregamos a la tarea. Solo conservo recuerdos agradables de aquellas fechas, que me permitieron conocer a tantas personas interesantes a las que no se ve pero que son tan importantes para que todo funcione bien. Mi experiencia como asesor del movimiento vecinal y la participación en asambleas sindicales en los años 70 y 80 me facilitaron moverme con cierta normalidad en entrevistas, asambleas electorales y reparto de folletos por la calle, superando mi carácter un tanto tímido. El escasísimo tiempo que tuvimos y el hecho de no aparecer en las encuestas nuestra candidatura y no permitírsele participar en mesas redondas a las que sí asistían las demás candidaturas que competían con la nuestra, dificultó que pudiéramos hacer llegar a todos los ciudadanos nuestro programa y objetivos. A pesar de ello nuestra candidatura obtuvo más de 1.800 votos, que en aquellas fechas consideramos como muy valiosos, teniendo en cuenta las circunstancias antes citadas. Mi sensación al finalizar el proceso fue la de que tanto los demás miembros de la candidatura como yo habíamos cumplido dignamente con nuestra obligación como ciudadanos ya que opino que todos debemos estar siempre disponibles a trabajar al servicio de los demás en cualquier actividad pública. No puede haber una tarea más satisfactoria cuando se realiza con entrega y honradez.

Fue candidato de Alternativa dos Veciños a la Alcaldía de A Coruña en las elecciones municipales de 2015