Las municipales de mañana constituyen el test de resistencia para las mareas que irrumpieron hace cuatro años como muestra de la "unidad popular" que derivó en el proyecto autonómico En Marea. El espacio político se juega sus tres símbolos: las alcaldías de A Coruña (Marea Atlántica), Santiago (Compostela Aberta) y Ferrol (Ferrol en Común). En 14 concellos incluidos Ferrol, Lugo, Pontevedra y Ourense se presenta En Marea o listas afines a Podemos, Anova y Esquerda Unida, por otro.
El líder de En Marea, Luís Villares, puso punto y final a la campaña en la ciudad ourensana donde reivindicó a las mareas como "los únicos espacios políticos que pusieron sobre la mesa las propuestas progresistas que ni el PSOE ni el BNG se atrevieron a formular". Lo hizo en apoyo de Ourense Mellor, rival de Ourense en Común. Villares confía en que el 26-M permita "consolidar" la presencia de En Marea" en el ámbito local mediante las candidaturas a las que sirve de paraguas.
En A Coruña, el alcalde, Xulio Ferreiro se mostró confiado en ser la opción más votada. Recibió el apoyo del líder de Podemos en Galicia, Antón Gómez-Reino.El regidor de Santiago, Martiño Noriega, comparte objetivo con Ferreiro, si bien reconoció que el resultado será "ajustado" y se "decidirá en la foto finish". Y Jorge Suárez, alcalde Ferrol, fijó como meta "tener un voto más" que el resto de partidos tras un mandato de "desgaste", durante el que rompió su bipartito con el PSdeG.
