La división de los socios de la En Marea que se presentó a las elecciones autonómicas „actualmente rota de facto„ provocó la proliferación de candidaturas y el enfrentamiento mutuo en 15 de los 313 ayuntamientos gallegos. La lucha electoral se ha traducido en una acusada bajada o la desaparición en esa quincena de municipios, con la excepción de Cangas do Morrazo, y ha supuesto perder „solo en estas circunscripciones„ un total de 33 ediles.

Los socios se han visto en las urnas en las siguientes localidades: Ferrol, Betanzos y Ames, en la provincia de A Coruña; Lugo y Sarria, en la de Lugo; Pontevedra, Sanxenxo, Vilagarcía, Baiona, Cangas, Gondomar, Nigrán, Marín y Ponteareas, en la de Pontevedra; y Ourense, en la provincia con igual nomenclatura.

Pierden 33 concejales

Las candidaturas rupturistas mantienen solo 17 actas de concejal en los 15 ayuntamientos donde se enfrentaron, mientras que en 2015 habían conseguido un total de 50 en estos mismos municipios, de manera que redujeron a menos de la mitad el número de representantes.

La única excepción fue en Cangas do Morrazo. En el lado opuesto se sitúan las confluencias que, teniendo representación en 2015, han acabado desapareciendo tras los comicios de este domingo en nueve municipios. Son Betanzos, Pontevedra, Sanxenxo, Baiona, Nigrán, Marín y Ponteareas y en los ayuntamientos de Lugo y Ourense.

Mientras, en cuatro municipios, las candidaturas de este espacio redujeron su representación, pero conservan concejales: Ferrol, Ames, Vilagarcía y Gondomar.

En la provincia de A Coruña, la pérdida más sonora es la de Ferrol en Común, una bajada que también le supondrá a la formación liderada por Jorge Suárez dejar de gobernar en la ciudad departamental. De seis ediles obtenidos en las urnas en mayo de 2015, esta candidatura se quedó con tres representantes, mientras que Marea de Ferrol (la apoyada por En Marea) y Xuntos Actúa (una escisión de Podemos que en su día también estuvo en Ferrol en Común) se quedaron en cero representantes.