La incertidumbre se ha convertido en una constante en el día a día de millones de personas tras la irrupción de la crisis sanitaria, económica y social generada por la pandemia Covid-19. Un contexto en el que se multiplican las dudas en múltiples campos, también en el de las relaciones personales: “¿Cómo se desarrollarán a partir de ahora?” , “¿volveremos a ser los de antes?”. Entre los múltiples interrogantes surgidos a raíz de los acontecimientos de las últimas semanas, uno destaca entre todo ellos por suscitar especial interés en el mundo de la publicidad, y ese no es otro que el que se pregunta por la organización de los eventos del futuro.

El equipo de la empresa Moloon, líder en el sector de venta de artículos de publicidad, se ha aventurado a responder a esta pregunta a través de un prudente análisis, en el que pronostica una probable transformación del sector de las citas corporativas con motivo de la pandemia: “Es muy posible que se de paso a nuevas formas de organización y asistencia a todo tipo de eventos así como que se asienten todavía más algunas ya existentes previamente”, explican en este sentido para a pasar a apuntar a un aumento de la apuesta por el formato ‘on-line’ entre las tendencias más destacables.

“Se producirá con casi total seguridad. Este es un tipo de evento que permite a las empresas ahorrar costes al tiempo que se elimina el riesgo de contagio. Son cada día más visibles y es que muchas de las empresas no quieren dejar de tener contacto con sus clientes. Afortunadamente, hoy en día existen multitud de plataformas que permiten la realización de congresos y eventos ‘on-line’ como ‘Zoom’’ o ‘Microsoft Teams’, entre las más destacadas’’.

Un formato prometedor entonces que, en cualquier caso, no siempre funciona igual de bien: “Como empresas, hemos de revisar en profundidad qué tipo de evento se adapta mejor a nuestros objetivos. Si queremos ofrecer un producto o servicio en concreto, es probable que un evento ‘on-line’ puede ser una buena opción, pero, en cambio, si lo que queremos es forjar relaciones personales con nuestros clientes, quizás una videoconferencia de cuatro horas donde solamente pueda hablar el organizador no sea la mejor de las opciones”, matizan y añaden: “De hecho, hoy en día, estamos asistiendo a una sobrecarga de emisiones en directo que provoca que muchos de los usuarios interesados en este tipo de congresos dejen de conectarse a través de las plataformas más comunes para este tipo de servicios”.

Sea como fuere, de lo que no les cabe duda a los expertos de Moloon es de que los eventos corporativos no desaparecerán: “¿El principal motivo? Muy simple, somos humanos y como tal necesitamos relacionarnos, contar nuestras experiencias y compartir nuestro conocimiento, y el mejor medio para hacerlo es a través de los eventos presenciales. Un aspecto que sí cambiará radicalmente, en cambio, es la forma en la que nos desplazamos a dichos eventos y el aforo de los mismos. Lo más probable es que dejemos de tomar un avión para asistir a un evento que tengamos fuera de nuestro país, por lo que quizás optaremos por eventos nacionales”.

En opinión de los profesionales de Moloon, otro de los aspectos que cambiará en el futuro próximo será el número de asistentes a estas reuniones corporativas: “Dejaremos de ver eventos masivos y es probable que las pocas personas que acudan deban asistir con las protecciones sanitarias correspondientes”. Así, las empresas que se dediquen a realizar eventos presenciales deberán asegurar las medidas de prevención impuestas por sus respectivos gobiernos, con compras de mascarillas al por mayor para abastecer al público, entre otras acciones.

“No podemos asegurar con certeza cómo serán los eventos corporativos en un futuro, pero sí podemos observar la existencia de ciertas tendencias que han llegado para quedarse, como los eventos ‘on-line, así como recalcar la importancia que los eventos presenciales han tenido y tienen como parte fundamental de nuestra sociedad”, concluyen para despedirse desde Moloon.