Regalar una joya es siempre una buena idea por su valor sentimental y simbólico, es algo que se lleva en contacto con la piel. Pero además la joya es moda, es estilo, y los hombres de hoy lo saben.

"La joyería para hombre solía ser muy limitada, siempre sota, caballo y rey. En cambio ahora, cada vez es más frecuente ver a los chicos-y no tan chicos- con joyas muy diferentes a las que estábamos acostumbrados. El hombre actual es seguidor de las modas y las tendencias y se fija al escoger su joya porque sabe que eso es lo que da el toque final a un look". Así lo explica el diseñador y orfebre Fernando Gallego, que cuenta cómo sus clientes varones son en la actualidad muy exigentes, modernos y atrevidos: "Buscan una joya que sea actual y al mismo tiempo les gusta diferenciarse, quieren que esa joya sea especial. Por eso, tienen preferencia por la pieza hecha a mano que tenga alguna característica que la haga única", añade.

Pulsera brazalete para chico de oro blanco y amarillo. CEDIDA

Antigüedades genuinas certificadas

Joyas como las de la Colección Antiques, colección por la que el diseñador ha recibido hasta dos premios nacionales de diseño, realizadas con antigüedades genuinas certificadas como flechas griegas o monedas romanas. Cada pieza es única en el mundo, nunca hay dos iguales.

Para cada uno de estos pequeños tesoros se realiza una montura de oro a mano, siempre respetando el objeto antiguo para que no pierda su valor. Las pulseras de cuero y oro con moneda y los colgantes con flechas pequeñas son dos de las piezas que mejor se venden para hombre.

Sus otras colecciones cuentan también con joyas para hombre basadas en estos principios de originalidad, calidad y exclusividad: más clásicas o más vanguardistas, siempre están hechas a mano, de una en una. Diseños que, aunque huyen de lo ostentoso, no pasan nunca desapercibidos ante quien nos observa.

Colgante con moneda romana del Siglo IV. Cedida

Expuestas en museos nacionales

Posiblemente por eso, las joyas de este artesano afincado en Outes, además de premiadas, han sido expuestas en museos nacionales como el de Artes Decorativas. También podemos verlas en personajes famosos y celebrities del cine, la televisión, la literatura o el arte de nuestro país. El éxito de sus diseños se ve reflejado también en la gran cantidad de piezas que se venden a través de internet a clientes de toda España, Europa, Estados Unidos e incluso Australia. 

Colgante con flecha griega antigua. Cedida

Apuesta Unisex: la barrera se diluye

Fernando Gallego también señala que en muchas cosas se han "diluido las barreras de sexos" y que numerosos diseños son ya completamente unisex, como colgantes, pulseras o anillos. En esta línea destaca cómo, por ejemplo, llevar dos o tres cadenas con distintos colgantes pequeños a distintas alturas, los conocidos como layers; o llevar varios anillos finos en distintos dedos, resulta cada vez más frecuente entre los hombres a los que le gusta la joyería.

Del mismo modo, otras piezas, las de toda la vida, se han renovado: "Vuelve a llevarse el sello, pero en lugar del típico que tuvieron nuestros padres, se lleva uno un poco más pequeño en el dedo meñique", anota el prestigioso diseñador.

El sello se reinventa con nuevos conceptos como este anillo de ónix. Cedida

“Recipientes de sentimientos”

Volviendo al principio, este profundo conocedor del sector insiste en que las joyas son mucho más que moda, son más que algo bonito que ponerse: "Cuando son un regalo de un ser querido, llevan con ellas una importante carga sentimental, se convierten en el símbolo de un momento feliz". En palabras de Fernando son “recipientes de sentimientos” que nos acompañarán para siempre. Por eso, se despide, es importante la calidad, para que dure toda la vida.

Para saber más:

https://www.joyeriafgallego.com/