Mucho tiempo ha pasado desde que la Política Agraria Común (PAC) nació en la Europa de los años 50 para paliar la escasez de alimentos tras la Segunda Guerra Mundial. Marcada entonces por un evidente carácter intervencionista, no fue hasta 1992 cuando el Consejo de Europa aprobó una transición entre las ayudas ligadas a la producción a unas ayudas a la renta de los agricultores con pagos por hectárea y cabeza de ganado y el establecimiento de medidas para la mejora de estructuras agrarias. Posteriormente, llegaron otras reformas que consolidaron el modelo actual y que han dado con la PAC 2022, que es la última campaña antes de que entre en vigor el Plan Estratégico Nacional de la PAC 2023-2027. Galicia se juega mucho en este envite.

“En Sabadell Gallego apostamos por impulsar un agro más eficiente a través de recursos naturales mejor protegidos”

Los mimbres con los que se va a tejer la nueva estrategia se alinean con los objetivos del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia de España, que se va a desarrollar a través de los Fondos Next Generation de la Unión Europea. Estos fondos pretenden una transformación de modelo productivo de la economía basado en la digitalización, la innovación y la sostenibilidad. ¿Y qué traslado tiene a los sectores agrario y ganadero? Pues el objetivo común es el de modernizar y transformar el sector a un modelo de producción más eficiente y sostenible, empleando para ello el conocimiento, la innovación y la digitalización, muy especialmente en las zonas rurales de Galicia, tan dependientes del sector primario.

“El objetivo común es el de modernizar y transformar el sector a un modelo de producción más sostenible”

Se trata, en definitiva, de que la PAC incentive a los agricultores y ganaderos gallegos a que acometan la transformación de sus explotaciones a través de los denominados Eco-Esquemas. La transformación requiere de inversión, y ésta, con el fin de que sea más efectiva, debe estar totalmente ajustada al tamaño y características de cada explotación.

En este escenario de mejora y financiación suficiente, Sabadell Negocio Agro se suma a dar soluciones, dado que están especialmente sensibilizados con todos aquellos temas que afectan al sector primario, tan importante para la economía. Hablamos, entre otros, de la eficiencia ecológica, la incorporación de jóvenes agricultores para potenciar el tan necesario relevo generacional, la reforma de la Ley de la Cadena Alimentaria o de la Ley de Bienestar Animal

En Sabadell Gallego apuestan por impulsar una agricultura más eficiente a través de unos recursos naturales mejor protegidos. Sostenibilidad y desarrollo económico en paralelo. Estamos hablando de una PAC 2022 que va a destinar 4.865 millones de euros al sector, de forma que se beneficien 665.000 productores agrícolas y ganaderos.

El hecho de que Sabadell Gallego pueda ofrecer un valor añadido radica en que se trata de un socio de referencia en el sector, como lo prueba el galardón de Mejor Entidad Financiera Agro recibido en 2021, por ser una de las entidades más especializadas en productos de financiación e innovación específicos para el sector primario.

Liquidez al sector agroalimentario a través del préstamo FlexiAgro

Las formas en que Sabadell Negocio Agrario puede ayudar son muy diversas, pero todas ellas tienen la característica común de que se adaptan a las necesidades específicas de sus demandantes. Por eso están muy cerca de los profesionales productores del sector agroalimentario –tan importante en Galicia y en permanente expansión—y saben de la importancia de dotar de liquidez a los agricultores y ganaderos antes de que se haga efectivo el pago de la PAC por parte de la administración pública. Se trata de un préstamo adaptado al calendario del sector y que permite financiar/anticipar la citada ayuda, así como las campañas agrarias (anticipo de cosecha) o el coste de la primas Agroseguro, entre otros.

Banco Sabadell plantea cuatro ofertas sectoriales claramente diferenciadas para cubrir de forma integral las necesidades, bien financieras bien en forma de servicios del sector primario. Dependiendo de la actividad a la que se pertenezca (agraria, ganadera, pesquera o vitivinícola) se plantea una oferta especializada y adaptada a las necesidades y calendarios de ingresos. “Sabemos que la estacionalidad de un viticultor no es la misma que la de un ganadero o de un agricultor”, explican.

Los clientes de Banco Sabadell de estos sectores tienen así la posibilidad de gestionar su día a día y financiar sus proyectos de inversión. Sirvan como ejemplos, la modernización de granjas, la transformación a ECO de sus explotaciones o nuevas plantaciones o la adquisición de maquinaria. Todo ello a través de productos financieros que tienen la carencia de años necesaria, con cuotas adaptadas a los ingresos y calendario de pagos de nuestros profesionales productores.

Para hacer mucho más sencillas gestiones que pueden llevar tiempo si se desconocen, toda la oferta sectorial está disponible en la web Negocio Agrario de Banco Sabadell Gallego, donde, además, se cuenta con la posibilidad de pedir cita previa con su gestor especializado. Un paso más en la digitalización, sus clientes disponen de la app Agro, en la que se puede acceder a las noticias más destacadas del sector, así como información de subvenciones y una agenda con las principales jornadas y eventos y aplicaciones que puedan resultar de interés para el sector primario.

“En definitiva, se trata de que nuestros clientes sientan que Sabadell Gallego cubre todas sus necesidades, por pequeñas que sean. Una de las claves está en que ambas partes hablamos el mismo lenguaje ‘de especialista a especialista’. Por eso apoyamos con éxito –y así nos lo reconocen-- a un sector esencial para la economía gallega”.