206 ilusiones. Tantas como chavales de Abegondo que sueñan con ponerse la camiseta del primer equipo en Riazor. La fuerza del Deportivo no está solo en su grada o en su historia. La cantera coruñesa es la única que puede presumir de un balón de oro español (Luis Suárez) y las dos centenas de chavales que se encuentran ahora mismo en las categorías inferiores aspiran a seguir los pasos de Fran, que conquistó todos los títulos nacionales saliendo de los equipos base.
El Dépor tuvo un conjunto B casi desde sus inicios y se ha nutrido en estos ciento diez años de las Escuelas Scopelli, del Fabril, del Deportivo Juvenil y de los Modestos de A Coruña y dio un paso adelante en 2003 cuando, por fin, pudo inaugurar El Mundo del Fútbol de Abegondo en la era Lendoiro. Antes, en 1996, su equipo juvenil fue campeón de España ante el Madrid en Puertollano, pero detrás de la proeza no había una infraestructura que la sustentase. Un milagro.
Hoy en día tiene equipos desde el Benjamín B hasta el Fabril, conjunto filial y antesala del primer equipo. El club ha invertido este año 1,2 millones de euros para formar a todos sus jóvenes que serán guiados por los 24 entrenadores que trabajan cada día con todos ellos. Ahora mismo Pedro Mosquera y Álex Bergantiños son los dos únicos coruñeses en el primer equipo, aunque solo el segundo pasó por la base tras llegar del Imperator.
La inversión y la ilusión está encaminada a que poco a poco esa cifra sea mayor y para ello se ha hecho una fuerte apuesta para que el Fabril ascienda a Segunda B. La idea es que el salto a la élite sea cada vez menor. Ahora mismo es una de las asignaturas pendientes.
A esta marea de jóvenes, hay que sumar los dos equipos femeninos con 37 jugadoras que quieren seguir la estela del glorioso Karbo.
