El ciclista español del equipo Tinkoff, Alberto Contador, tras su caída de hoy en el último kilómetro de la séptima etapa de la Vuelta a España, "sólo tiene cortes y moratones", según informó en la página web del equipo su director deportivo, Sean Yates.

"Parece que lo aplastaron en la curva; él ha sufrido caídas esta temporada por estar muy atrás en el pelotón, y hoy estaba en la parte delantera e igual se vio envuelto en el percance, así que realmente es mala suerte", explicó el director deportivo.

Sobre el rendimiento del Tinkoff, Yates aseguró que "los muchachos estuvieron donde necesitaban estar cuando importaba y se apegaron al plan hasta el final".

Finalmente, Yates recalcó que "no es el momento ideal" para que ocurra una caída porque se avecinan "tres etapas duras", por lo que mantienen "los dedos cruzados" a la espera de los chequeos que le hagan al español "más tarde".

Contador, tras la caída, ha expresado su contrariedad al afirmar que "se está poniendo la cosa complicada".

"Todavía estoy caliente, pero tengo reventado el lado izquierdo y el gemelo lo tengo muy mal", ha dicho antes de someterse a un reconocimiento médico para conocer el alcance de sus lesiones.

El madrileño ha explicado que iba "bien colocado" en esos últimos metros porque todos sabían que los últimos 300 metros eran en ascensión y podía haber algunas pequeñas diferencias y en la curva "he entrado por dentro y se ve que hay algunos entran en las curvas sin tocar el freno y me he ido al suelo".