Pese a la alegría por la clasificación para la final de la Copa del Rey tras eliminar al Caldes, Juan Copa, entrenador del Liceo, estaba serio tras el partido de ayer, probablemente ya analizando qué hacer, qué tecla tocar, para que el equipo, ya muy justo de fuerzas, haga hoy un último esfuerzo. Es el premio gordo, aunque el objetivo ya está cumplido. “Estoy muy contento por ellos. Es nuestra tercera final consecutiva. Es difícil ganar títulos, pero también es difícil llegar a finales y esta era muy importante por que es la nuestra”, asegura el técnico, que promete que lo darán todo: Haremos un buen partido para ir a por el título”.

Sobre el partido contra el Caldes, Copa reconoce que el Liceo fue inferior en la primera parte. “El partido tienen un inicio en el que creo que no entramos bien o que por lo menos el Caldes entra mejor. A pesar de eso, tenemos la bola parada que nos pudo dar sobre todo tranquilidad. Y en cambio nos cogen en un contra y nos hacen gol. Pero el equipo supo sufrir sabiendo que ellos estaban siendo mejores”, analiza. Todo cambió en el descanso. “Ya en el final de la primera parte se vieron cosas positivas. Y en el descanso rectificamos, lo hablamos, creímos que el camino tenía que ser ese, confiamos y conseguimos una remontada rápida, que fue importantísimo. Ahí el equipo se liberó”, continúa el coruñés. “El Caldes después tuvo su arreón hasta que encontramos el tercero de Marc (Grau). Pero sobre todo volvimos a ser un equipo serio defensivamente y Carles (Grau) nos ayudó en momento importantes”, finalizó Copa sobre lo ocurrido en el encuentro de ayer.

El entrenador del Liceo reconoce que el equipo empieza a estar un poco justo de fuerzas. “Hemos competido hasta el final en la liga, otros años no llegamos tan ahogados al final. Además el hecho de jugar en casa tiene sus puntos a favor y en contra. Y en contra lógicamente es que tienes esa presión y el grupo es un grupo joven. Y aun así creo que en la segunda parte físicamente estuvimos bien”, indica. “Tenemos algunos golpes, molestias... pero da igual. Lo que hemos hablado antes de empezar la Copa es que el lunes ya hay vacaciones y cada uno se irá para su casa a descansar, y que vale la pena el esfuerzo”.

La afición, fundamental

Precisamente, las fuerzas que faltan en las piernas las pone un poco el corazón y otro poco, el público. “Esto es una maravilla. Acostumbrado a no tener a nadie, la poca gente que viene nos está ayudando mucho”, reconoce. “Es una lástima estas circunstancias porque mañana —por hoy— esto estaría a reventar. El equipo va un poquito justo, pasamos momentos complicados, y el público nos ayudó mucho. Va a ser fundamental”, concluye.