El Consello Comarcal del BNG en Vigo decidió el jueves la expulsión de Pedro Gómez-Valadés por considerar incompatible su militancia en la formación nacionalista con su cargo de presidente de la Asociación Galega de Amizade con Israel (Agai), una asociación que para el Bloque defiende a un Estado imperialista.

Pedro Gómez-Valadés recurrirá esta decisión, por lo que su expulsión del Bloque deberá ser ratificada por parte del Consello Nacional de la formación, presidida por Anxo Quintana. Si Gómez-Valadés acatase la decisión del consello comarcal, el máximo órgano de la dirección frentista no tendría que pronunciarse sobre este polémico caso.

Sin embargo, Goméz-Valadés quiere que se dé el debate en Santiago y se apresuró a recordar al portavoz nacional de la organización, Anxo Quintana, que cuando saltó la controversia a comienzos del año pasado aseguró que nadie sería expulsado del BNG. "Ahora tiene que dar explicaciones", declaraba ayer el presidente de Agai.

El escándalo comenzó cuando un grupo de militantes del BNG reclamó la marcha de Gómez-Valadés, tras descubrir que a finales de 2006 había sido elegido presidente de un colectivo que pretende recuperar la huella judía de Galicia. Entonces, la polémica fue tal que la Embajada de Israel en España envió una carta al propio Anxo Quintana mostrándole su preocupación.

Gómez-Valadés no sólo planteará su caso ante el Consello Nacional, también pedirá que la Comisión de Garantías del Bloque Nacionalista Galego se pronuncie y está dispuesto a ir a los tribunales, pues, defiende que en su caso, "se vulnera la Ley de Partidos, que establece que el funcionamiento interno de los partidos debe ser democrático, y también los estatutos del BNG, que fijan el derecho de los militantes a la discrepancia pública y a la libertad de expresión".

Su expulsión de la formación nacionalista pilló a Gómez-Valadés por sorpresa el jueves, cuando participaba en una reunión del consello comarcal de Vigo, del que es miembro. Entonces, la responsable del consello, Manuela Rodríguez, rescató una carta de diciembre de 2007 en la que cinco afiliados del BNG pedían que se resolviese ya el expediente de expulsión a Gómez-Valadés.

Según la versión del propio afectado, la dirección entendió que era el momento de tomar una decisión, pues ya se habían celebrado las elecciones generales del 9 de marzo. Tras "un debate desagradable", se procedió a la votación y la mayoría acordó la expulsión de Pedro Gómez-Valadés.

Este militante de Vigo, adscrito a la corriente de Esquerda Nacionalista, en cuya mesa nacional participa, denuncia el comportamiento "sectario del BNG" que le expulsa "por no compartir la visión oficial del conflicto palestino-israelí".

Para Gómez Valadés, "el Bloque es antiisraelí y después es pro-palestino", mientras que él es "projudío, pero también propalestino", pues reconoce el derecho de los palestinos a tener su Estado, igual que los judíos vieron satisfechos sus derechos hace 60 años por mandato de Naciones Unidas.