Cendón, liberado tras 38 días de cautiverio

La residencia en Nairobi del embajador español en Kenia se convirtió ayer en un improvisado y cálido hogar para el fotógrafo coruñés José Cendón liberado tras permanecer treinta y ocho días secuestrado y llevado de "cueva en cueva" por las montañas de Somalia. El fotógrafo fue secuestrado el pasado 26 de noviembre junto al periodista británico Colin Freeman -también puesto en libertad ayer-, cuando ambos realizaban un reportaje sobre la piratería en Somalia para el diario británico Daily Telegraph. Exteriores niega haber pagado ningún rescate, aunque la hermana del coruñés sostiene que se llegó a algún tipo de acuerdo con los raptores.

Cendón, de 34 años, aseguró ayer, pocas horas después de su liberación, haber vivido "días duros" durante su cautiverio en Somalia pero señaló que, "en general", tanto él como su compañero de secuestro, el periodista británico Colin Freeman, lo llevaron "bastante bien".

En declaraciones a TVE, el coruñés explicó que durante estos 38 días de cautiverio sus secuestradores les llevaron "de cueva en cueva" por las montañas de Somalia y los tuvieron ocultos en, al menos, cinco distintas.

"Tuvimos días duros, no nos vamos a engañar, pero en general lo llevamos bastante bien", dijo el fotógrafo.

Tras señalar que su liberación fue "incluso más interesante que una película", explicó que "lo único" que le preocupaba durante su cautiverio era "el estado" de sus padres y el saber que ellos estarían preocupados.

"Me han secuestrado, pero más o menos sabía cómo iba a ir la cosa y más o menos fue como yo pensaba que iba a ir", señaló Cendón, que reconoció que sus secuestradores les trataron "bien", no les maltrataron "en ningún momento" y les alimentaron todos los días.

Poco después de que el Gobierno confirmara el fin del cautiverio de Cendón, el titular de Asuntos Exteriores y Cooperación, Miguel Ángel Moratinos, indicó que el fotógrafo, con quien conversó telefónicamente, se encontraba "bien, contento, con la moral alta y psicológicamente fuerte". El ministro explicó que el fotógrafo rechazó el ofrecimiento del Gobierno de fletar un avión para un inmediato regreso a España, ya que prefiere viajar primero a su base de operaciones, situada en Addis Abeba, en Etiopía

Mientras que Moratinos sostiene que no se pagó ningún rescate y que las gestiones que se realizaron fueron sólo "políticas y diplomáticas", Julia, la hermana de José Cendón, declaró que "se llegó a un acuerdo con los secuestradores" para que el fotógrafo quedara en libertad, aunque especificó que a su familia en ningún momento le llegó, a través de los canales oficiales, demanda económica alguna de los secuestradores.

Cendón llegó ayer tarde a Kenia después de que el embajador español en aquel país, Nicolás Martín Cinto, viajara a Somalia para recibir al coruñés.

Cendón volvió a pisar ayer el mismo aeropuerto en el que fue secuetrado hace más de un mes. Elfotoperiodista gallego fue raptado junto con su compañero británico cuando iba rumbo al aeropuerto somalí de Bossaso tras realizar un reportaje sobre la piratería. Los dos reporteros, que habían rechazado escolta policial, habían terminado ya su trabajo y abandonaban la región de Puntlandia.

Fue el conductor del vehículo que los trasladaba a la instalación aeroportuaria quien informó de que una banda armada los había secuestrado. Las autoridades somalíes acusaron a los traductores que los acompañaban de ser cómplices del rapto, ya que se cree que fueron ellos quienes pusieron en contacto a los secuestradores con los dos reporteros.

La banda de raptores los trasladó a una escarpada zona en las montañas de Puntlandia. Pero no los tuvieron siempre retenidos en el mismo sitio sino que los fueron trasladando intentando huir no sólo de la policía sino también de otras bandas rivales.

Durante todo ese tiempo se mantuvieron contactos entre los secuestradores y los representantes enviados por la diplomacia británica y española. Aunque a pocos días del rapto las autoridades somalíes anunciaron que la liberación de Cendón y Freeman se produciría en breve, aún tendría que transcurrir un mes para poner punto y final a la captura de estos dos reporteros.

El ministro del Interior de la región autónoma somalí de Puntlandia, Abdullahi Said Samatar, aseguró ayer, al igual que Moratinos, que no se pagó ningún rescate a cambio de la liberación del fotógrafo, sino que tanto ésta como la de su colega británico Colin Freeman se produjeron gracias a la mediación de los líderes tribales.

"Los dos periodistas europeos fueron liberados sin que mediara pago de rescate alguno", afirmó Samatara.