Una sentencia de la UE declara justa la fianza impuesta al capitán del 'Prestige'

El Tribunal Europeo de Derechos Humanos dictó ayer una sentencia en la que establece que España no violó el Convenio Europeo de Derechos Humanos al imponer una fianza de tres millones de euros al capitán del petrolero Prestige, Apostolos Ioannis Mangouras, detenido en noviembre de 2002 a raíz del accidente del buque frente a las costas gallegas.

El tribunal con sede en Estrasburgo da así la razón a España frente a la apelación presentada por Mangouras, en la que aducía que el artículo 5.3 de dicho Convenio estipula que toda persona detenida "tiene derecho a ser juzgada en un plazo razonable o liberada durante el procedimiento" si hay "una garantía que asegure la comparecencia del interesado a juicio". En opinión del capitán griego, la fianza fue "excesivamente elevada" y no tuvo en cuenta algunas circunstancias personales, como su profesión, renta, patrimonio e incluso su avanzada edad -67 años en 2002-.

Sin embargo, la sentencia señala que la fianza, "aunque elevada, no fue desproporcionada", teniendo en cuenta la "gravedad del delito" y las "consecuencias catastróficas" en los ámbitos medioambiental y económico que se derivaron del vertido del Prestige. Tras resaltar que "la privación de libertad se extendió por un periodo más corto que en otros casos examinados por el Tribunal", la sentencia afirma que no se puede "ignorar la preocupación creciente y legítima que existe tanto a nivel europeo como internacional respecto a los delitos contra el medio ambiente" por lo que ve "razonable" que España quisiera garantizar su presencia en el juicio con una fianza "elevada".

Tras el desastre del Prestige, que vertió en las costas más de 70.000 toneladas de fuel, su capitán fue detenido. Cuatro días más tarde, un juez de instrucción de A Coruña ordenó su detención provisional bajo fianza de 3 millones. Dicha cantidad se estipuló en función de la "gravedad de los delitos" en los que podía haber incurrido (delito contra los recursos naturales y el medio ambiente, y desobediencia a las autoridades administrativas), así como por la condición extranjera del acusado, sin vínculos en España.

Mangouras pidió su puesta en libertad y la reducción de la fianza a 60.000 euros, pero el Juzgado de Instrucción de Corcubión la rechazó y su recurso ante la Audiencia Provincial de La Coruña tampoco prosperó. Mangouras fue puesto en libertad al mes siguiente, tras depositar la aseguradora del buque el aval bancario. Mangouras vive actualmente en Grecia, donde debe comparecer cada 15 días en la comisaría de Icarie, su isla natal, o en Atenas, donde residen sus hijos.