La Guardia Civil intercepta cada día a 12 gallegos por delitos de tráfico

Por tomar una copa de más, pisar demasiado el acelerador o conducir sin carné. Un total de 4.332 conductores fueron imputados el año pasado por estos delitos en la comunidad gallega. Desde la entrada en vigor de la reforma del Código Penal en materia de tráfico, en diciembre de 2007, 12 automovilistas gallegos delinquen cada día en las carreteras, enfrentándose a penas de entre tres meses y cuatro años de cárcel. Sólo en los primeros 15 días de 2009, la Guardia Civil interceptó en la red viaria gallega a 153 conductores por conductas temerarias al volante, el 64% de ellos -98- por superar la tasa de alcohol de 0,6 mg/l, tres por excesos de velocidad tipificados como delito, cinco que habían agotado su saldo de puntos y 34 que nunca había obtenido el permiso de conducir.

Según el balance de la actividad delictiva en carretera durante 2008 divulgado ayer por la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil en Galicia, los delitos contra la seguridad vial en la comunidad se dispararon el año pasado un 179% respecto a los datos de 2007. En total, la Agrupación de Tráfico en Galicia y las unidades territoriales de la Guardia Civil formularon en 2008 un total 4.332 imputaciones a conductores temerarios , frente a las 1.553 abiertas el año anterior. Unos datos que suponen una media de 361 conductores imputados cada mes por delitos de tráfico frente a los 130 interceptados en 2007.

Tráfico se propone retirar a los hooligans de la carretera. Desde la reforma penal en materia de seguridad vial, quienes se pongan al volante en estado ebrio se enfrentan hasta seis meses de cárcel, la retirada del permiso de conducir de uno a cuatro años y una multa económica que lleva aparejada obligatoriamente una pena de trabajos en beneficio de la comunidad. El índice de automovilistas imputados por conducir ebrios se disparó un 114% el año pasado: 2.668 infractores cazados, lo que supone el 16% de los 15.702 registrados en toda España. Un dato, según la propia Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil de Galicia, "destacable" cuando "el porcentaje del peso poblacional y del censo de conductores es bastante inferior". Otros 11.118 conductores gallegos fueron denunciados vía administrativa por superar la tasa de alcohol.

Por conducir 80 km/h por encima de los límites de velocidad establecidos en vías interurbanas o travesías, la Guardia Civil interceptó a 31 conductores, lo que supone el 10,5% del conjunto de afectados en el resto de España.

Aunque el año 2009 sólo acaba de empezar, en la primera quincena de enero un total de 154 conductores fueron puestos a disposición judicial por delitos contra la seguridad vial, 98 de ellos por superar la tasa de alcohol permitida, 34 por ponerse al volante sin haber obtenido el permiso de conducir, ocho por conducir pese a haberle sido retirado el carné, cinco tras haber agotado su crédito de puntos y tres por excesos de velocidad.

En lo que va de mes, en las carreteras gallegas se registraron cuatro víctimas mortales: tres salidas de vía y un peatón atropellado. Accidentes de madrugada, en estado ebrio o sin el cinturón de seguridad. Ante las características de estos accidentes, la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil lanzó un aviso a los conductores: "El alcohol, la velocidad, el no uso de los elementos de seguridad, la falta de atención y la circulación por las vías locales de deficiente configuración resultan letales en la conducción". Por este motivo, la Guardia Civil reforzará en los próximos meses la vigilancia en las carreteras locales.

El periodo de gracia dado por la DGT a los conductores sin carné no ha surtido efecto. Aunque la reforma del Código Penal en materia de seguridad vial entró en vigor en diciembre de 2007, Tráfico había acordado dar una moratoria de cinco meses para que los conductores sin carné obtuvieran el permiso. Sin embargo, desde que ponerse al volante sin permiso es delito -desde el 1 de mayo-, la Guardia Civil de Tráfico denunció a un total de l.050 personas sin haberlo obtenido nunca, otras 257 con el permiso retirado por las autoridades judiciales y 103 con el saldo de puntos agotado.

El dato sorprende si se tiene en cuenta que el Gobierno había anunciado una moratoria antes de que conducir sin carné pasase a ser considerado un delito perseguido con penas de entre tres y seis meses de cárcel. El objetivo del Ministerio del Interior era dar una última oportunidad a la bolsa de conductores que nunca habían sacado el carné para que aprovechasen esos cinco meses y legalizasen su situación. En la primera quincena de enero, 34 gallegos fueron interceptados por la Guardia Civil sin haberse examinado del permiso de conducir.

Por conducción temeraria, la Guardia Civil denunció el año pasado a 83 conductores, diez más que en 2007. Otros 106 fueron imputados por negarse a realizar pruebas de alcoholemia, un 186% más que el año anterior.