El 'Playa de Xanxian' vuelve a faenar tras la ayuda de buceadores

Buzos militares de la patrullera 'Tarifa' libraron del aparejo enredado al pesquero gallego que llevaba tres días a la deriva en Gran Sol

P. P | A Coruña

El arrastrero gallego Playa de Xanxian, que llevaba desde el pasado miércoles a la deriva a unas 325 millas al norte de Fisterra y a unos 350 kilómetros de la costa francesa al enredarse parte de su aparejo con el eje y la hélice del barco, volvió ayer a faenar tras lograr desprender las redes que le impedían usar el motor principal.

Para que el barco pudiera reanudar su actividad fue necesaria la colaboración del personal de la patrullera de la Armada Española Tarifa, que acudió el pasado jueves en auxilio del pesquero y cuyos buceadores lograban ayer por la mañana desenredar el aparejo. Una parte de él fue a parar al fondo del mar mientras que otra salió a la superficie, como explicó a este diario el patrón del pesquero, Moisés Piñeiro. Según Piñeiro, los militares realizaron ayer por la mañana un último intento de resolver el problema del pesquero y lo lograron tras dos horas de trabajo, en las que trabajaron los buceadores de la patrullera. La intervención evitó que pesquero tuviera que solicitar un remolque para volver a su puerto base en Vigo, como ya habían sugerido los militares para el caso de que fallase el intento de ayer.

Pese a la satisfactoria resolución de su problema, el responsable del barco se mostró crítico con la labor de los efectivos de la patrullera militar "que estuvieron 48 horas a nuestro lado pero de las que sólo trabajaron en total unas cuatro".

El Playa de Xanxian sufrió el percance con su parejo sobre las siete de la mañana del miércoles, por lo que pidió ayuda. La patrullera Tarifa, que se encontraba en las inmediaciones como apoyo a la flota que participa en la costera del bonito, acudió en su ayuda a mediodía del jueves y, tras varios intentos, logró ayer liberar al pesquero, que a primera hora de la tarde de ayer reanudaba su faena en el caladero de Gran Sol.

El barco, con diez tripulantes (entre gallegos y africanos) tiene previsto iniciar en el plazo de un par de días su vuelta al puerto de Vigo para descargar.

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