Así lo ha asegurado a Europa Press el presidente del comité de empresa de Lavacolla, Xabier Castro, que se mantiene encerrado junto con el resto de los representantes sindicales en el aeródromo compostelano desde las 10.30 horas, tal y como este miércoles lo acordó una reunión.

Tanto Castro como sus compañeros en el comité de empresa, que se encuentran pendientes de una reunión que se está manteniendo en Madrid y las decisiones que allí se tomen, estiman que este encierro, el primero de sus movilizaciones, durará unas 24 horas.

Aún así, han confirmado que sus acciones no perjudicarán el correcto funcionamiento del aeropuerto ni a sus viajeros, a los que únicamente quieren hacer "visible" su malestar por la futura privatización de la empresa pública.

En cuanto al aeropuerto de Alvedro, el comité de empresa ha celebrado esta mañana una reunión, tras la que han iniciado un encierro que, previsiblemente, durará hasta el mediodía. En el caso de Peinador, cuyo comité también ha mantenido una asamblea, iniciarán el encierro en torno a las 12.00 horas, siguiendo así las movilizaciones convocadas en toda España.

REIVINDICACIONES

Con estas movilizaciones los trabajadores de Aena intentarán defender que la empresa "siga siendo pública", en contra de la intención del Ministerio de Fomento de "vender los aeropuertos más rentables a empresas privadas".

Por ello, ha indicado Xabier Castro, los trabajadores reclaman al ministro de Fomento, José Blanco, que "entregue un documento de lo que realmente se pretende hacer con esta empresa", que actualmente gestiona todos los aeropuertos españoles "sin costarle un euro a los ciudadanos".

En contrapartida, los trabajadores "intuyen" que con la privatización de Aena "se cerrarán los aeropuertos que no den beneficios", como aquellos pequeños aeródromos con pocos vuelos pero que cumplen un papel de "cohesión territorial", con la consecuencia adicional de pérdida de empleos. Asimismo, para Xabier Castro, peligra el modelo gallego, dada la "proximidad geográfica" de los aeropuertos" que, "ningún gestor privado podría sustentar".