Las escuchas telefónicas realizadas por la Unidad Central de Delincuencia Económica y Fiscal (UNEF) de la Policía Nacional a varios imputados en la operación Orquesta y las reflexiones tanto de los agentes como del juez instructor apuntan a que habría más concellos en los que se ejecutaban prácticas ilícitas, al margen de los tres ya imputados -Cee, Fisterra y Mazaricos-. Son los Ayuntamientos de Sada, Corcubión y Muxía -el primero gobernado por BNG y PSdeG y los dos últimos en manos del PSdeG- los que aparecen reflejados en las conversaciones del sumario de la trama de corrupción en A Costa da Morte.

"Ya me pasó igual en Sada...", asegura el empresario musical Jorge López, imputado en el caso, cuando habla de cómo registrar una factura de una cantidad de dinero pagado en negro. En una conversación telefónica que mantuvo con el alcalde de Cee, el independiente Ramón Vigo, en noviembre de 2009, ambos tratan de arreglar un desfase en las cuentas de las fiestas de A Xunqueira. El Ayuntamiento consiguió una subvención de 120.000 euros, pero el representante de espectáculos sólo tenía el recibo de 58.000 euros, en concepto de pago por orquestas, por lo que buscaban la manera de documentar los 62.000 restantes. "No tiene que ir a nombre del Concello, claro, porque eso es para justificar... tengo que hablar con la interventora", afirma López, que añade justo después: "Me parece que no la contabiliza porque ya me pasó igual en Sada...".

Con la conversación, según el juez de Corcubión, "se infiere sin lugar a dudas indicios serios y sólidos de la posible perpetración de un delito contra la Hacienda Pública", pero también llama la atención sobre la referencia al otro municipio. "Jorge hace alusión a que un modo de proceder semejante se habría observado en otros concellos y concretamente menciona al de Sada", destaca el titular del juzgado número 2, que cree "necesario" confirmar este extremo para "determinar si se trata de un hecho puntual o si en realidad nos encontramos ante un entramado pergeñado y preparado para ejecutar con cierta habitualidad este tipo de prácticas".

En Corcubión son varias las menciones a lo largo del sumario. En una de ellas, el constructor Daniel Ogando, también imputado, amenaza con dejar de sufragar el mantenimiento de unos jardines en el municipio "dado que nadie le paga y no le han adjudicado ninguna obra", según la Policía. "Lo que pretendo es hablar con el alcalde, hace un mes que prácticamente hablé con él. Decía que iba a acercarme dentro de un mes, a ver si había algo y si no hay nada, paro, que le den por el culo", se queja Ogando. Los agentes de la UDEF sospechan que el interlocutor, que le dice que "intentaría darle algo en compensación", forma parte de la corporación, que preside el alcalde socialista Francisco Lema. "¿Es normal que una empresa privada abone unos gastos de mantenimiento de jardines que debe saldar un ente público como un Concello?", se pregunta la Policía.

En otra de las conversaciones que salpican al Concello de Corcubión, el protagonismo recae en Carlos Rey Paz, un funcionario de justicia, en cuyos diálogos telefónicos intenta "influir en integrantes del Ayuntamiento para la solicitud de una subvención" de la que se beneficiaría una de las asociaciones que preside. A través del móvil de esta persona también se desvela otra posible trama en Muxía, en la que podría estar implicado su alcalde. Rey Paz, en palabras del juez, "se haría pasar por concejal del municipio" de Muxía y conseguiría, "un claro trato de favor" por parte del Concello en la contratación de orquesta, que le gestionaría el empresario López Lago. Las arcas municipales le pagarían una comisión y "todo ello con el conocimiento y aquiesciencia del propio alcalde señor Félix Porto, según se infiere de las conversaciones antes apuntadas". Y es que López le facilita a una tercera persona incluso el número de teléfono móvil del regidor para que "se ponga de acuerdo con él para todo y para que le mande por fax la factura". El empleado del juzgado de paz de Muxía ingresaría 500 euros "por si hay cualquier problema", según conversación del empresario con el agente de una de las orquestas contratadas.

Contratos a dedo y trato de favor. El sumario de la operación Orquesta también salpica a la conselleira de Traballo, Beatriz Mato, quien al parecer podría haber intervenido para dar un puesto de trabajo en un geriátrico de Vimianzo a la novia de uno de los constructores imputados en la trama de corrupción de A Costa da Morte. Según las conversaciones telefónicas intervenidas, el alcalde de Fisterra, José Manuel Traba (PP), reconoce haberle enviado el currículum de Isabel Martínez, la novia de Daniel Ogando, "a Bea" aunque dice que "puede darle otro toque para que no se olvide". Finalmente, la plaza en la residencia geriátrica de Vimianzo, que depende del departamento de Mato, fue para la novia del constructor de Muxía imputado por cohecho y tráfico de influencias.

Preguntada ayer Mato por la adjudicación de esta plaza tras las conversaciones con el alcalde de Fisterra, la conselleira se limitó a decir que "no recuerda" haber mantenido ningún contacto telefónico con Traba para que la novia de Daniel Ogando hijo obtuviese un puesto en el geriátrico. No obstante, Mato minimizó la posible ayuda que le reclamó el regidor al asegurar que "muchísima gente" le pide "ayuda" cuando va "por la calle". Pero en todo caso, aseguró desconocer el caso concreto de Vimianzo ya que negó conocer tanto al constructor como a su novia. "No tengo información, no conozco a la persona y no sé qué tipo de contratación se hace en empresas privadas", concluyó Mato en relación al geriátrico de Vimianzo.

Y como agradecimiento, una vez más los Ogando recurrieron a regalos. En este caso no para la conselleira sino para el alcalde de Fisterra. Una vez concedida la plaza, Daniel Ogando pide a su novia que lo acampañe para agradecérselo. "Amiga, te comprometiste. ¡Hostia! Si no va te dejo, cago en Dios. Te sale redondo. Vas a venir conmigo al despacho a darle las gracias personalmente", revelan las conversaciones intervenidas.

Otros casos

En el sumario de la operación Orquesta también aparecen otros dos municipios nombrados por los imputados en la trama, aunque en el caso de Noia y O Pino no se consigue esclarecer por las conversaciones si los cargos políticos cedieron a las peticiones de los empresarios. Daniel Ogando habla por teléfono con el ex concejal de Urbanismo del primero de los ayuntamientos, José Manuel Romero, para citarle a una comida y añade que “aunque ya no esté en política le invita igual porque fueron buena gente, aunque ya no tenga obras en Noia”. En el caso de O Pino, Jorge López le pregunta a una persona no identificada si conoce al alcalde para intentar que un amigo suyo construya el campo de fútbol del municipio. Le responde el hombre que quede para comer con él y se lo plantee.