De la misma forma que la Consellería de Facenda tuvo que revisar su previsión de crecimiento del PIB gallego para 2012 un mes después de presentarla, ayer tocó revisar el de este año. La Xunta contaba con cerrar 2011 con un aumento del 1%, pero finalmente el incremento será del 0,8%, dos décimas menos de lo previsto, a pesar de buen comportamiento, dijo la conselleira, del sector primario, del industrial, del de la alimentación y el farmacéutico.

La nueva previsión pone de manifiesto el parón de la economía gallega en el segundo semestre del año. La desaceleración ha sido muy sustancial, pues entre enero y junio el PIB en Galicia había crecido siete décimas. Con los nuevos datos, esto significa que en el segundo semestre la economía se ha quedado sin fuerza, al rebajarse su previsión de crecimiento a solo una décima para acabar el año en un 0,8%. Para el próximo año, se calcula que el PIB subirá un poco más, el 1,1%, pero cuatro décimas menos que las estimadas por el Ejecutivo gallego a principios de septiembre, cuando hablaba de un 1,5%.

Facenda estima que este crecimiento será posible gracias a que se mantendrá el consumo interno y, sobre todo, por la demanda externa, que será el verdadero "motor" de la economía de ña comunidad gallega.